En el comienzo de la que, según se espera, será una temporada de verano record para los principales destinos turísticos del país, ya se empiezan a escuchar las quejas por el aumento de tarifas. Primero fueron los alquileres, ahora es el transporte de larga distancia. Quienes con anticipación habían buscado precios de pasajes en ómnibus entre dos y tres semanas atrás, ahora se encuentran con que, al iniciarse la temporada alta, al habitual cambio de tarifas se le suma una “puesta en valor real” que en algunos casos alcanza el 50 por ciento con respecto a los precios del año pasado.
Sin demasiadas opciones ante la sorpresa del aumento, unos pocos se quejan mientras la mayoría asiente con resignación, vuelve a sacar la billetera y paga ese porcentaje extra del que, aunque no estaba en sus planes, no puede escapar. Es que, a pesar de las variaciones mínimas entre los precios que ofrece una y otra empresa, el aumento es casi sistemático.
“Este nuevo incremento se calcula entre el 30 y el 40 por ciento en todos los destinos turísticos. Al cambio de tarifas propio del pase de temporada, se suma una equiparación con los costos reales de los pasajes que durante el año se mantuvieron en promoción. A todo esto, además, hay que sumarle cerca de un 10 por ciento más.” Así explicó Darío Giménez, encargado de boletería de la empresa Chevallier, esta ecuación en la que todos los porcentajes suman. Y ejemplificó: “Un pasaje a Bariloche que antes costaba 87 pesos, hoy se fue a 117 y toda la zona de las sierras cordobesas que durante el año estuvo a 20 pesos ahora se fue a 40”.
A pesar de la sorpresa de algunos pasajeros que ayer comentaban el aumento con bronca en las colas de la Terminal de Omnibus de Retiro, este nuevo cuadro tarifario estaba anunciado desde hace un mes. A través del decreto 2407, la Secretaría de Transporte declaró al sector automotor en estado de emergencia y dispuso varias medidas para aliviar esa condición. Entre los numerosos beneficios, se les otorgó la posibilidad de aplicar una suba en las tarifas que alcanza hasta el 60 por ciento en ciertos destinos.
En una recorrida por las boleterías de Retiro, Página/12 pudo comprobar que el aumento se efectivizó en casi todos los servicios y que algunos precios llegaron a duplicarse en relación con los de la temporada anterior y aún más si se los compara con los que se vendieron hasta hace algunas semanas como promociones de temporada baja. “Yo vivo en Corrientes y vine en setiembre por una oferta de 25 pesos. Ahora compro la vuelta a 58 y encima, aunque es un abuso, no me puedo quejar porque en otra empresa me quisieron cobrar 75”, relató en la tarde de ayer Margarita Vallejos, después de retirar su pasaje en la terminal de Retiro.