Con el voto de los veinticuatro legisladores macristas, la Legislatura aprobó ayer la ampliación del presupuesto porteño para este año por 971,5 millones de pesos. El proyecto fue rechazado por quince diputados de la oposición, en tanto que siete se abstuvieron. Doce legisladores estuvieron ausentes y otros dos resolvieron no bajar a la sesión. De la suma aprobada, la mayor parte, 250 millones, estará destinada a reconocer mayores costos en el servicio de recolección de residuos, lo que generó el rechazo de la oposición. Otros 220 millones están destinados a pavimento, bacheo, mantenimiento de veredas, arbolado y puesta en valor de hospitales.

El proyecto recibió el voto negativo del kirchnerismo, el ibarrismo y parte de la Coalición Cívica. La redeterminación del Presupuesto fue diseñada por el ministro de Hacienda, Néstor Grindetti, y modifica el monto asignado para este año, unos 17.500 millones de pesos. La solicitud se sustenta en “el aumento en los recursos del Gobierno que se ha observado como resultado de la combinación de un moderado crecimiento de la actividad económica, del incremento general del nivel de precios reales de la economía y de la intensificación de los operativos de recaudación tributaria”, según explicaron fuentes del oficialismo.

Desde la oposición, Eduardo Epszteyn calificó de “desmesura” el incremento destinado al pago de los servicios de Higiene Urbana. “Desde la adjudicación de la licitación, en 2005, el costo se incrementó en más del 260 por ciento, sin considerar la inflación, lo cual es insostenible porque en ese lapso el salario de los trabajadores aumentó en un 94 por ciento”, calculó Epszteyn.

Sobre el mismo punto, Martín Hourest (Igualdad Social) concluyó que “estamos financiando ganancias extraordinarias en manos privadas y desfinanciando al Ente de Higiene Urbana”. El kirchnerista Francisco “Tito” Nenna consideró que “lo que nos está pidiendo Macri es engrosar los bolsillos de los grandes empresarios”. En tanto, el diputado Marcelo Parrilli, del MST-Nueva Izquierda, observó que “el mayor monto de esta ampliación va a las empresas que recogen la basura, que este año embolsarán 1427 millones, record histórico que insume el 7,5 por ciento del Presupuesto. En cambio, si todo el servicio fuera estatal, la Ciudad ahorraría 667 millones”. Gonzalo Ruanova (Nuevo Encuentro) cuestionó a su turno que “la gestión de Macri aumentó la deuda de la ciudad en un 130 por ciento y no va a dejar ninguna gran obra de infraestructura”.

En la oposición causó malestar que algunos diputados como Diego Kravetz, Raúl Fernández y Ruanova dieran el quórum que hizo posible la sesión. También se cuestionó que doce diputados estuvieran ausentes.