La recolección de residuos se reanudó ayer a la tarde en el área metropolitana, después de que los trabajadores de la Ceamse levantaron el paro que cumplían desde el domingo, pero en la ciudad de Buenos Aires la situación volverá a ser normal recién esta noche, según confirmaron a este diario las autoridades porteñas. La medida de fuerza, que puso a la Ciudad al borde de la emergencia sanitaria, se levantó después de que el gremio recibió la garantía de que la Ceamse seguirá teniendo un protagonismo central en el futuro de la disposición final de residuos. El organismo, creado durante la dictadura, gestiona la basura del área metropolitana y, si bien es estatal, subcontrata buena parte de sus servicios a empresas privadas. “Nos hemos puesto de acuerdo con los dos gobiernos, el de la Ciudad y la Provincia, para ponernos a trabajar en este tema, y acordamos la realización de un Polo Ambiental en donde la Ceamse va a ser el actor fundamental”, dijo Jorge Mancini, secretario general del sindicato.

El paro de casi 48 horas de los trabajadores de la Coordinación Ecológica Area Metropolitana Sociedad del Estado (Ceamse) generó montañas de basura en la ciudad de Buenos Aires y el conurbano. El acuerdo llegó tras la reunión que encabezó el gobernador bonaerense, Daniel Scioli, y de la que participaron el jefe de Gabinete de la provincia, Alberto Pérez; el titular de la Ceamse, Raúl de Elizalde; el titular del Organismo Provincial para el Desarrollo Sustentable (OPDS), José Molina; el ministro de Medio Ambiente y Espacios Públicos del gobierno porteño, Diego Santilli, y Molina, secretario general de la Asociación Gremial Obreros y Empleados de la Ceamse.

Scioli dijo que “la reunión permitió destrabar el conflicto y sirvió para coincidir en la necesidad de encarar la solución de fondo al problema de la basura”. “Dado el crecimiento de nuestra economía, se ha generado un mayor volumen de residuos, que en forma inteligente tenemos que tratarlos para reducir el origen y lograr enterrar la menor cantidad posible”, explicó el gobernador.

Esa solución estaría en la creación de un “polo ambiental”, con “tecnologías de última generación”, que se ocuparía del reciclado y estaría gestionado por la Ceamse, según explicó Mancini a Página/12. Ese polo se instalaría junto al relleno Norte III, en San Miguel, que tiene una vida útil de dos a tres años.

El gremio también aspira a que Ceamse maneje la planta de separación que el gobierno de Mauricio Macri anunciará el mes próximo: ya habría recibido el compromiso del ministro Santilli. En la reunión, el sindicalista –diputado provincial vinculado con el líder de la CGT, Hugo Moyano– reclamó “la extensión del relleno Norte III hacia 70 hectáreas de Campo de Mayo”, lo que permitiría extender su vigencia hasta cinco años más.

Mancini, por su parte, aportó algunas claves para interpretar el conflicto: “En Capital Federal quedó resuelto, pero en Ensenada y González Catán vamos a hacer una asamblea para resolver puntualmente qué va a pasar, ya que estamos totalmente en desacuerdo con la licitación que se realizó para la construcción de una planta de tratamiento porque está en clara violación de dos leyes provinciales”.

Se refería de esa manera a la licitación lanzada el 5 de octubre para la construcción de un centro de disposición final para el partido de La Plata y municipios vecinos con finalización prevista para dentro de diez meses. La construcción de esa planta deja afuera en la gestión de los residuos a la Ceamse, la todopoderosa sociedad estatal, integrada por la ciudad de Buenos Aires y la provincia, pero garantizaría la fuente de trabajo a los empleados de Ceamse.

Sergio Federovisky, titular de la Agencia Ambiental Municipal de La Plata, replicó que “esa planta de tratamiento permitirá cumplir con la sentencia judicial que ordena el cierre del relleno sanitario de la Ceamse de Ensenada”.

La Coordinación Ecológica Area Metropolitana Sociedad del Estado (Ceamse), creada en 1976 por la última dictadura militar, maneja desde entonces la gestión de todos los residuos del área metropolitana, subcontratando a empresas privadas. Pese a que es una sociedad de los Estados porteño y bonaerense, ni la Ciudad ni la Provincia tienen atribuciones para auditar sus cuentas.