SOCIEDAD
› EL PROFUGO ENVIO UNA CARTA DOCUMENTO AL JUEZ DESDE LA PLATA
El último chiste de Horacio Conzi
El prófugo más famoso del país mandó una carta documento desde el centro de La Plata donde aclara cuáles son los abogados que desea que lo representen. Aunque figura su documento, aún no se sabe si fue personalmente. Su pedido carece de valor legal.
› Por Carlos Rodríguez
El empresario prófugo Horacio Conzi sigue sin aparecer, pero su fantasma –o vaya a saber quién– se atrevió a ingresar al edificio donde funciona la Suprema Corte de Justicia bonaerense, en pleno centro de La Plata, para enviar desde una sucursal del Correo Argentino una breve carta documento dirigida al juez de Garantías número 2 de San Isidro, Abel Díaz, a cargo de la causa en la que se investiga el homicidio del joven Marcos Eschenone. Desde la impunidad de su sábana, el hombre que se ha vuelto invisible se encargó de hacer un trámite insalvablemente nulo, como es decir por escrito, de supuesto puño y letra, desde las sombras, que sus abogados defensores son el mediático Fernando Andrés Burlando y Ricardo Montemurro. Ellos son los únicos que gozan “de la confianza” del fugitivo, según dejó sentado el personaje, que se retiró del edificio de 13 y 48 sin hacer ruido, tal como entró. “La acreditación es nula y su única abogada acreditada es la defensora oficial María Gómez”, confirmó a Página/12 una fuente allegada a la causa, que desechó la validez jurídica de los mensajes del más allá.
Desde hace dos días, a pesar de su extrovertida personalidad, el abogado Fernando Burlando viene manteniendo un tozudo silencio. ¿Horacio Conzi está pensando en entregarse? ¿Por qué enviar por carta documento un nombramiento que un prófugo está imposibilitado de hacer? Las preguntas que alcanzó a formular este diario nunca fueron respondidas por Burlando, que prometió hablar “media hora después” y nunca más atendió el celular. Como fondo de ese único contacto telefónico, se escuchaba el trinar de los pájaros y el ladrido de un perro grande, como el ovejero alemán que Hugo Conzi tiene en la casa familiar de Santa Rita 1536, en el barrio La Horqueta de Boulogne. El propio Hugo, tan locuaz en su momento, decidió “llamarse a silencio”, según admitió un allegado al clan con el que pudo comunicarse Página/12. “Los periodistas fatigan”, justificó el vocero de voz ronca que atendió el teléfono celular de Sergio, uno de los gerentes del complejo Dallas de Martínez.
En suma, el único que dio alguna señal fue el mismísimo fantasma de Horacio Conzi. Su enigmática aparición se produjo en la mañana del martes, en la sucursal número uno del Correo Argentino en La Plata, ubicada en la planta baja del edificio que ocupa la manzana formada por las calles 13, 47, 14 y 48. Allí estaba fechada la carta documento, según acredita el sello impreso por el empleado que atendió al misterioso personaje. La notificación –que recién se conoció ayer– fue dirigida al juez Abel Díaz y estaba firmada por Horacio S. Conzi, D.N.I. número 12.821.616. La numeración es la correcta, pero nunca podrá saberse quién la envió.
“Es absurdo pensar que el propio Horacio Conzi se haya presentado allí; sería una locura de su parte”, opinó una fuente de la causa. El edificio donde está la sucursal platense cobijó históricamente a los tribunales de la capital provincial. En el primero y en el segundo piso funcionan 28 dependencias de la Suprema Corte de la provincia de Buenos Aires, entre ellos los despachos de los miembros del alto tribunal y la Procuración General de la Corte. El edificio tiene cinco entradas y también están allí los tribunales comerciales y civiles.
“Para enviar una carta documento es necesario que la persona que firma presente su D.N.I. o en su defecto que esté representado por alguien debidamente acreditado por el remitente”, informó ayer a Página/12 una empleada de la sucursal del Correo Argentino ubicada en Avenida de Mayo al 600, en la Capital Federal. Ese es el trámite burocrático habitual. El texto lo escribe el remitente luego de comprar el formulario, que cuesta 25 centavos. “En la sucursal platense funcionan todos los tribunales y es posible que se omita la presentación de documentos, ya que siempre los envían abogados o asistentes que son conocidos por los empleados del Correo Argentino”, explicó una fuente judicial platense.
En el breve texto, el supuesto Horacio Conzi notifica de puño y letra “que conforme lo establece el artículo 89 del C.C.P. (Código ProcesalPenal), es mi voluntad designar como mis abogados defensores a los doctores Fernando Andrés Burlando y Ricardo Montemurro, únicos profesionales de mi confianza, revocando toda otra designación anterior”. No hubo ninguna otra designación, ya que el abogado Norberto Pérez hablaba en nombre de los Conzi como representante legal de Dallas. La defensora de Conzi, María Gómez, fue nombrada de oficio, como marca la ley.
Los fiscales Mario Kohan y Hernán Collantes dijeron que la presentación “carece de toda validez” y enviaron un instructor judicial para tratar de obtener una descripción de la persona que realizó el trámite. “Al empleado del Correo habría que recomendarle que lea los diarios”, comentó a este diario una fuente cercana a la Suprema Corte, habida cuenta de la difusión pública del caso, que ha convertido en famoso el apellido Conzi.
Subnotas