Más de cien personas enfurecidas ingresaron ayer con palos en un destacamento policial del partido de San Nicolás y, tras golpear a los tres efectivos que estaban en ese momento en la seccional, en 15 minutos liberaron a cuatro presos que habían sido detenidos una hora antes cuando, según informó la policía, intentaban carnear una vaca robada en una estancia. Sin embargo, los manifestantes señalaron que los hombres estaban cazando y no intentaban robar ningún animal. Hasta anoche, dos de los detenidos había sido recapturados, entre ellos un menor de 17 años, en tanto los otros dos seguían prófugos.
Cerca de las 18 de ayer, hombres, mujeres y chicos ingresaron con palos al destacamento de Río Tala y, tras golpear a los policías, rompieron el candado del único calabozo en el que estaban alojados, todos juntos, los supuestos “cuatreros”. El adolescente de 17 años y tres hombres de 24, 25 y 29 habían sido detenidos poco antes en una estancia ubicada en el kilómetro 151 de la ruta 9, propiedad de la empresa postal Andreani.
Según informó a Página/12 el jefe de la Delegación Departamental de Seguridad de San Nicolás, José Ferrari, los cuatro detenidos habían sido sorprendidos mientras robaban e intentaban carnear una vaca en propiedad privada. Sin embargo, los cerca de 150 manifestantes que ayer rodearon la seccional de Río Tala para protestar negaron esa versión y explicaron que estaban repudiando la detención y decidieron ingresar porque los policías “estaban golpeando a los presos”. Además, señalaron que nunca llegaron a liberar al único menor detenido porque “estaba esposado al calabozo”.