Una peluquería de Seal Beach, al sur de la ciudad norteamericana de Los Angeles, fue ayer escenario de una masacre perpetrada por un hombre que disparó contra los clientes, asesinando a seis personas e hiriendo a otras tres. El tirador salió en auto de la peluquería ubicada dentro de un centro comercial y fue seguido por la policía, que lo detuvo en las cercanías del lugar, sin que se resistiera. En su auto, la policía encontró varias armas. “No estamos seguros aún acerca de desde dónde disparó, si lo hizo desde la entrada contra gente que corría buscando refugio, si persiguió a alguna de las víctimas afuera del local, pero hubo víctimas en todos los rincones del salón”, dijo Steve Bowles, del Departamento de Policía de Seal Beach. Todas las personas fallecidas menos una estaban dentro de la peluquería. Los tres heridos fueron internados en un hospital y se encuentran en grave estado. La policía investigaba ayer la hipótesis de que el agresor tuviera algún tipo de vínculos con esa peluquería de Seal Beach, una pequeña localidad de 25 mil personas al sur de Los Angeles.