SOCIEDAD
› EN EL CASO DE LA CHICA ASESINADA EN CALIFORNIA
Recompensa por un homicida
La madre de Ornella Murúa Maccari –la joven cordobesa asesinada el jueves en la ciudad californiana de Downey– le hizo ayer un pedido desesperado al gobernador de Córdoba, José Manuel de la Sota: que la ayude a conseguir una visa humanitaria para ella y su marido para que, después de regresar a la Argentina, le permita volver a los Estados Unidos “para vengar la muerte de Ornella”, en alusión a la captura del asesino y el juicio posterior. El esclarecimiento, sin embargo, aún parece lejano. Gabriel Ramallo, esposo de la madre de la chica, salió al cruce de las versiones que aseguraban que el homicida estaba identificado. “No es cierto, todavía no tienen nada”, dijo a Página/12. Mientras la policía y el FBI continuaban con la búsqueda del asesino, la Fundación Carol Sund –integrada por los familiares de la mujer que fue asesinada, junto a su hija y la cordobesa Silvina Pelosso, en el Parque Nacional Yosemite, en 1999– ofreció una recompensa para quienes puedan aportar datos sobre el crimen.
El matrimonio explicó ayer que, al no tener papeles, la única posibilidad de regresar a los Estados Unidos para poder seguir de cerca la investigación del crimen de Ornella, es con una visa humanitaria que sólo puede tramitarse en Buenos Aires. “Hasta ahora sólo recibimos un llamado de un funcionario del gobierno cordobés que nos prometió que ellos van a formalizar un pedido, pero nada más”, desconfió Ramallo, aún sin certezas sobre la posibilidad de volver a California. Luego, el gobernador De la Sota prometió “ayudar en todo lo que se pueda a la familia de una cordobesa que fue salvajemente asesinada”. Ese no es el único problema al que se enfrentan: el costo de traer al país el cuerpo de la chica supera los 10 mil dólares.
Aunque cuentan con el apoyo formal del consulado argentino en Los Angeles, no recibieron ayuda económica oficial, salvo de una agrupación estadounidense de asistencia a víctimas de crímenes. “Nosotros vamos a acompañar la gestión porque recursos económicos no tenemos, pero otorgar una visa es de cualquier manera un resorte exclusivo del gobierno estadounidense”, dijo a este diario el vicecónsul argentino en California, Raúl Guastavino.
En este sentido Ramallo señaló que lo más necesario es el papel que les permita volver a ingresar, ya que parte de los costos también serán cubiertos por dos recitales que se realizarán en las ciudades de Los Angeles y Nueva York, organizados por las comunidades de argentinos que viven allá.
Ornella fue asesinada el jueves cerca de la medianoche cuando salía de su trabajo, en un local de hamburguesas de Downey, ubicado a menos de diez cuadras de su casa. Antes de salir, la adolescente de 18 años había llamado a su mamá para pedirle que no la fuera a buscar porque era una linda noche y quería volver caminando. Casi 12 horas después, la policía encontró el cuerpo en un descampado, al lado de la autopista 57, en el condado de Orange. Aunque aún no se revelaron los resultados de la autopsia, la hipótesis es que la joven habría sufrido un intento de violación y que habría sido fuertemente golpeada y luego estrangulada ya que no se encontraron señales de un ataque con armas.
Este viernes, la adolescente será velada en Downey. Luego, la familia y los amigos esperan el traslado del cuerpo a la Argentina “para que pueda tener su segundo velorio en Carlos Paz”, expresó Ramallo.