El 30 de abril, cuando el príncipe Guillermo y su esposa Máxima Zorreguieta sean coronados como reyes, “Amsterdam va a vivir una fiesta inolvidable”, aseguró el alcalde Eberhard van der Laan. Los preparativos para la ceremonia que volverá real la abdicación de la reina Beatriz, anunciada por ella misma el lunes, ya comenzaron e incluyeron una sesión extraordinaria en el gobierno holandés. Mientras que el alcalde de la ciudad donde sucederá la primera abdicación de la realeza europea en el siglo XXI se prepara para que al “evento acudan miles de turistas de todo el mundo”, la política holandesa comenzó a despedir a la suegra de Máxima Zorreguieta. “Desde dentro y fuera del país han llegado numerosos mensajes laudatorios y de agradecimiento para la monarca. Estas reacciones subrayan cuánto ha conmovido e inspirado la reina a las personas”, ponderó el primer ministro Mark Rutte. Ayer, casi todos los diarios de los Países Bajos publicaron suplementos en los que recordaron los 33 años de reinado de Beatriz. “La reina fue una valiosa asesora del gobierno”, dijo el ex primer ministro social-demócrata Wim Kok.