Inspectores municipales de Rosario fueron agredidos y perseguidos ayer a la madrugada al intentar clausurar un tradicional cabaret ubicado en el centro de la ciudad, en el que constataron que se brindaban servicios sexuales prohibidos por la ley de profilaxis. El incidente tuvo lugar en el cabaret El Palacio Berlusconi, ubicado en Sarmiento al 1100, cuando dos empleadas municipales y el director general de Inspección, Gregorio Ramírez, fueron agredidos verbal y físicamente durante un procedimiento de rutina. Los empleados acudieron ayer por la mañana a los tribunales locales para presentar una denuncia por lesiones y agresiones, se informó en el municipio. El local nocturno fue finalmente clausurado. Según relató Ramírez, durante el procedimiento fueron empujados y agredidos por empleados y mujeres que trabajan en el cabaret y también por los clientes. El Palacio Berlusconi ha sido denunciado por organizaciones sociales y la prensa “por actividades ligadas al proxenetismo y la trata”. Al llegar al local “vi a dos personas teniendo relaciones sexuales. Hay una ley nacional que lo prohíbe, la ley de profilaxis, por lo cual se dispuso la clausura”, explicó el funcionario. “Ante esto recibimos una agresión inesperada. Agresión física y verbal, nos han tirado con vasos, nos han sacado a empujones del lugar, tuvimos que convocar a la Guardia Urbana Municipal que nos tuvo que custodiar”, detalló. Las inspectoras “estaban muy nerviosas” relató, por lo que fue con ellas “a un bar a tomar algo para tranquilizarlas”, pero la gresca continuó allí. “Nos persiguieron, entraron al bar y rompieron mesas, vasos y demás. Fue un nivel de locura y de violencia impensada.”