Un asesor financiero que había estado preso por el crimen de una pareja swinger en Villa Elisa fue encontrado asesinado de un tiro en la cabeza dentro de un auto en el barrio porteño de Villa Ortúzar. El cadáver fue hallado a las 10.30 de ayer dentro de un Peugeot 307 negro descapotable estacionado en la calle Fraga al 1300, en el cruce con Heredia. El auto tenía patente provisoria, porque había sido comprado hace pocos días. Adentro encontraron manchas de sangre, pertenencias en el habitáculo y en el baúl gran cantidad de papeles relacionados con las actividades laborales de la víctima, que son ahora analizados por peritos científicos de la Policía Federal. El hombre estaba recostado sobre el asiento del acompañante, con las piernas sobre el lugar del conductor. Además del balazo, presentaba signos de haber sido golpeado.

Los vecinos dijeron que escucharon disparos cerca de las dos de la madrugada. El dato se conoció luego del hallazgo del cuerpo de Miguel Angel Graffigna, de 35 años. Agentes de la comisaría 37ª secuestraron videos de cámaras de seguridad que pudieran haber captado lo sucedido.

Roberto Casorla Yalet, abogado de la víctima, dijo que se había denunciado su desaparición porque no lo encontraban desde el viernes, luego de que saliera de su trabajo en el microcentro.

Familiares de Graffigna se acercaron ayer por la mañana al lugar donde estaba el auto. Abrazados y llorosos, se negaron a dialogar con la prensa. Graffigna trabajaba como asesor financiero, por lo que una de las hipótesis que se maneja es que el crimen podría estar relacionado con esa actividad, aunque no se descartan otros posibles móviles. Lo único que se descartó es que haya sido un suicidio. No hallaron el arma usada.

Graffigna tuvo una separación conflictiva de su ex esposa y fue víctima de amenazas en el marco de la división de bienes, entre ellos una casa en la localidad bonaerense de Ramos Mejía que aparentemente fue vaciada por la ex mujer. Se analiza la alternativa de un robo, pero se dice que es la hipótesis más débil.

Un dato mencionado por la policía fue que Graffigna estuvo preso por el crimen de la pareja integrada por Nicolás De Sousa (28) y Antonia Zárate (29), asesinados en 2004 en Villa Elisa, tras un encuentro swinger. En su momento, se dijo que el crimen se había cometido para robarles un cuadro de Picasso que se creía que la pareja tenía en su poder.

Graffigna estuvo en prisión unos tres meses, pero luego el juez de Garantías Guillermo Atencio dispuso su libertad y finalmente su sobreseimiento por falta de pruebas. Graffigna siempre aseguró ser inocente y acusó del doble crimen a la madre de su ex pareja, que estaba detenida por el robo de un cuadro de Quinquela Martín durante un incendio intencional en una dependencia municipal de Bahía Blanca.

El acusado había sido apresado luego de ser imputado por su ex pareja, la actriz porno y bailarina de caño Romina Iddon Silva (35), quien lo responsabilizó del doble crimen. Ella también está imputada por el hecho. Según la mujer, durante el encuentro swinger, Graffigna golpeó con un palo de béisbol a De Souza ocasionándole la muerte y luego ató a Zárate a una silla y rodeó con cinta de embalar todo su cuerpo hasta asfixiarla.

Graffigna sostuvo que Iddon Silva lo imputó para quedarse con la hija que tienen en común y aseguró que quienes asesinaron a la pareja fueron la madre de su ex mujer, Edith Silva, y la pareja de ésta, detenidos por el robo del cuadro Proas al sol, de Quinquela Martín.