Cuatro días antes de que terminara el tan esperado viaje de egresados a San Carlos de Bariloche, 24 estudiantes secundarios del colegio San Luis de La Plata fueron subidos a un micro y “devueltos a Buenos Aires” por la empresa que los había llevado, Flecha Bus. La decisión de la compañía fue tomada luego de que los jóvenes “destrozaran nueve habitaciones del hotel, a patadas y trompadas, revoleando y golpeando todo lo que encontraban desaforadamente: puertas, ventanas, teléfonos, paredes, camas, parlantes, estufas y muebles”, relató a Página/12 un empleado del hotel Arrayanes que prefirió no dar su nombre. El hecho ocurrió pasadas las 6 del domingo, luego de que el mismo grupo, parte de un contingente de 60 estudiantes, protagonizara una pelea en la discoteca By Pass y fuera echado por los empleados de seguridad del lugar. Los expulsados llegaron anoche a la terminal de ómnibus de La Plata, en tanto los otros 45 estudiantes continúan en Bariloche disfrutando de los últimos días del viaje.
Según el dueño de By Pass, Ricardo Rimoldi, la noche de violencia de los alumnos del colegio San Luis había comenzado en su discoteca un rato antes. “Cuando iba a empezar el show de rayos láser, hubo una gran pelea en la pista y esos 24 chicos fueron echados del boliche por los empleados de seguridad porque agredieron a otro grupo de estudiantes.”
Al salir del local, los jóvenes caminaron hasta el hotel Arrayanes, ubicado en la esquina de Palacios y O’Connor, a 50 metros del boliche, y subieron a sus habitaciones. Eran las 6.05 de la mañana y, al parecer, algunos de ellos habían “tomado demasiado alcohol”, según señaló un empleado del hotel. “Fueron diez minutos en los que rompieron todo. En total, quedaron nueve habitaciones dañadas, algunas más y otras menos. También se dijo que agredieron a algunos compañeros con matafuegos pero eso no nos consta. De cualquier manera, lo ocurrido ya era suficiente como para que se tomara la decisión de hacerlos regresar a sus casas, medida que se desprende de una cláusula del contrato, así que no hay más para decir sobre eso. Ahora nos interesa que los chicos lleguen bien a sus casas y que el resto del contingente pueda disfrutar lo que le queda del viaje”, explicó el apoderado de Flecha Bus en Bariloche, Pablo de Barba.
Incluso los dos padres que viajaron como acompañantes del contingente estuvieron de acuerdo con la expulsión de los 24 egresados, decidida directamente por las autoridades de la empresa apenas vieron el estado en el que quedaron las nueve habitaciones. Unas doce horas después, los jóvenes tenían sus bolsos hechos y se subían al micro especialmente dispuesto para “devolverlos a La Plata”. Según coincidieron coordinadores del contingente y algunos compañeros, “ese grupo de varones ya había tenido incidentes y habían demostrado ser agresivos”. Sin embargo, según comentó el abogado de la empresa, “lo del domingo fue demasiado. Nunca ocurrió algo parecido: puertas, ventanas, teléfonos, equipos de audio, muebles, mampostería. Destruyeron de todo”, enumeró De Barba.
En tanto, el secretario de Turismo de Bariloche, Hugo Cejas, dijo a Página/12 que “estos casos no son habituales, sino que son más bien sucesos aislados si se tiene en cuenta que cada año vienen unos 80 mil chicos. A pesar de que tenemos una normativa, nosotros sólo podemos expulsarlos cuando provoquen daños a terceros y en este caso no hubo ninguna denuncia. Por eso, creo la empresa tomó la mejor decisión, que es la de remitir a sus hogares a los chicos directamente involucrados. Eso está previsto en el contrato y es lo mejor que se puede hacer por todos”, remarcó.
La normativa municipal que habilita a las autoridades locales a expulsar a grupos de estudiantes “que no respeten las normas de convivencia” fue impulsada en junio de 1998 por el Comité de Turismo Estudiantil, formado por comerciantes, funcionarios del gobierno, autoridades policiales y empresas de viajes, junto a otras medidas, especialmente respecto del consumo de alcohol, tendientes a disminuir la cantidad de incidentes que se producen habitualmente en la temporada estudiantil.