La rutina era sencilla: cada día un camión blindado de la empresa Prosegur llegaba a la mañana al shopping Unicenter, en Martínez, y los custodios dejaban y retiraban dinero de algunos de los comercios. Pero ayer la rutina falló y un chofer del blindado, que no esperó a que sus compañeros regresaran del shopping, arrancó el camión: según los investigadores, el chofer se llevó más de un millón de pesos y, como no hubo robo, sería acusado de defraudación, un delito excarcelable.
“Una avivada que fue muy bien planeada”, caracterizó una fuente policial a lo que ayer presuntamente hizo Héctor Zárate, chofer de la empresa de seguridad Prosegur. Según la Fiscalía, Zárate es el principal sospechoso de llevarse 1.180.000 pesos del camión de caudales que conducía.
Ayer a las 9.40 arribó al shopping Unicenter, ubicado en Panamericana entre Paraná y Edison, un camión de Prosegur conducido por Zárate, de 40 años, y en el que viajaban un portavalores y un custodio, responsables de dejar y retirar dinero en algunos comercios. Según explicó a Página/12 el fiscal de San Isidro Luis Apolo, a cargo de la investigación, el chofer se quedó en el blindado –el móvil 894– y las otras dos personas “entraron al shopping con una saca, pero a los 4 o 5 minutos regresaron porque se habían confundido de saca y debían cambiarla”.
Cuando el portavalores y el custodio volvieron para cambiar la saca, el camión de caudales ya no estaba. Según indicaron fuentes policiales, Zárate condujo el blindado y lo abandonó a tres cuadras de Unicenter, en Edison y José Martí. Allí pasó el resto de las sacas (con más de un millón de pesos) a un vehículo utilitario blanco –un Renault Kangoo o Fiat Fiorino– en donde lo esperaban un hombre y dos mujeres, con quienes luego se fue. Según señalaron las fuentes, la camioneta “tenía una patente de un Chevrolet Corsa del partido de Malvinas Argentinas” y los testigos dijeron que el chofer habría actuado “con suma tranquilidad y sin despertar sospechas”.
Mientras tanto, el portavalores y el custodio denunciaron la desaparición del camión; junto a ellos estaba un supervisor de Prosegur que, según informó la fiscalía, llegó en otro vehículo e ingresó con los empleados a Unicenter para preguntarles a los clientes si estaban conformes con el servicio de la transportadora de caudales.
“Zárate tenía todo planeado. Lo fuimos a buscar a su domicilio de San Martín y nos enteramos que se mudó de allí hace dos meses”, contó uno de los investigadores. La DDI de San Isidro, que investiga el caso, espera ahora los resultados del análisis del video grabado por las cámaras de seguridad externas del shopping. “No tenemos registrado ninguna actitud violenta y la principal hipótesis es que no se trató de un robo sino de una defraudación, un delito que tiene una pena máxima de seis años y que es excarcelable”, afirmó Apolo.

Producción: Gabriel Entin.