Trabajadores de hospitales porteños y de programas pediátricos del SAME se movilizaron ayer a la Jefatura de Gobierno de la Ciudad contra la resolución 1657 que redujo las suplencias en guardias. Esta disposición afecta a 1500 profesionales y, si bien una medida cautelar la dejó sin efecto, la gestión de Mauricio Macri la mantiene en vigencia. Al respecto, un grupo de legisladores anunció que presentará un pedido de interpelación a la ministra de Salud porteña, Graciela Reybaud.

“Es muy grave, ya que de manera unilateral el Gobierno de la Ciudad aprobó la resolución que reduce 15 programas y deja en la calle a más de 1500 profesionales. La 1657 atenta contra programas emblemáticos como el Programa de Atención Domiciliaria de Urgencias (PADU Clínico y Pediátrico), los programas de Pediatra en Casa, Asistencia Infanto-Juvenil en Neuropsiquiátricos, de Violencia Familiar, para Niños Autistas, entre otros”, sostuvo Jorge Pachamé, médico de la Maternidad Sardá y el PADU Clínico y referente de la oposición en la Asociación de Médicos Municipales (AMM).

“Algunos están prácticamente cerrados, otros han sido reducidos y están afectados en un 30 y un 40 por ciento de las vacantes cubiertas por suplencias de guardia”, denunció Pachamé.

Además, explicó que a los hospitales “les llegó la notificación de la cantidad de guardias que tienen que reducir y los administrativos se amoldan a estas decisiones”. Este sería el caso del Hospital de Salud Mental Braulio Moyano, adonde mandaron un comunicado a la directora del área de Asistencia Social diciéndole que “ante la resolución, iban a hacer prevalecer el área de psiquiatría por encima de psicología, trabajo social y rehabilitación”.

“Estamos en el mismo conflicto que el SAME Pediátrico: de 500 guardias se pasa a 250 afectando a psicólogos, asistentes sociales y rehabilitación. Todo esto va en contra de leyes vigentes, como la ley de Salud Mental 26.657 y la 448 de la Ciudad, que hablan de equipos interdisciplinarios”, afirmó a Página/12 Lorena Avellaneda, asistente social del Moyano.

“Hay gente a la que todavía no la nombraron, que cobra bajo la nómina suplencias en guardias, que está virtualmente sin trabajo. Hay un amparo judicial del 27 de diciembre por el cual no tendríamos que haber cobrado menos ni tarde, como cobramos. La gente está yendo igual a trabajar para sostener los servicios. En el Moyano, hay 800 pacientes internados y 30 mil consultas externas al año. Necesitamos reforzar los servicios con la mayor cantidad de gente posible”, agregó Avellaneda.

En tanto, en el Hospital Alvarez se vieron afectados los programas de atención a víctimas de violencia familiar, violencia sexual, personas con adicciones y psicología. También sufrieron consecuencias por la resolución los grupos de trabajo de hemodiálisis, nefrología, cámara gamma, cardiología y flebología, que directamente desapareció.

“Hay 98 profesionales afectados por la resolución 1657 por trabajo en negro o irregular, porque no se hacen nombramientos y cobran como si hicieran suplencias de guardia; había ocho médicos de guardia y ahora hay siete; de 14 estudios que se hacían con cámara gamma ahora se realizan siete, porque está la mitad del personal. Los servicios no funcionan y se tuvieron que reprogramar turnos”, relató a este diario Osvaldo Saleh, cardiólogo del Alvarez y vocal por la oposición en la AMM.

“A esto hay que sumarle las obras por el incendio en la guardia, de enero de 2012, que todavía no comenzaron, la reducción que nos hicieron en el último aguinaldo y las causas judiciales que tenemos por la disminución salarial de mayo de 2013. Estamos ofuscados con el empleador y con la AMM, que está en connivencia con el gobierno porteño y perjudica a los empleados”, añadió.

En cuanto a los programas PADU Pediátrico y Pediatra en Casa, la intención del gobierno porteño sería reducir el número de empleados que recibe llamados y de médicos que asiste a niños en escuelas y hogares y bajar los sueldos de los que quedan al pagarles las horas en concepto de módulo y no de suplencias en guardias.

“En el SAME, desde fin de mes vamos a cobrar un 42 por ciento menos ya que, al desaparecer la categoría de suplencia de guardia, nos derivan a otra llamada módulo, en la que se cobra un sueldo mucho menor y en la que el mes que viene se va a reducir el personal a la mitad”, explicó Laura Schagrodsky, médica del programa Pediatra en Casa.

Por este motivo, los médicos pediatras del SAME continúan con el paro activo que llevan adelante desde hace casi dos meses.

“Nosotros atendemos código verde, es decir, casos que no son de vida o muerte, sino una asistencia a domicilio a niños en escuelas o casas. No hacemos código rojo. Hacemos paro activo estando en el lugar de trabajo. Somos el ejército de reserva”, puntualizó el pediatra Hugo Gauto, que participa de los programa PADU Pediátrico y Pediatra en Casa.

Por su parte, la legisladora del Frente para la Victoria, María Rachid, presente en el reclamo, aseguró que junto a sus pares Alejandro Bodart (Nueva Izquierda) y Gustavo Vera (Unen) pedirán la interpelación de la ministra Reybaud para que dé explicaciones de por qué no cumple con las órdenes judiciales.

“Acá lo que nos preocupa es la posición histórica del PRO de llevarse puesta la salud pública, la educación pública, el espacio público y a los ciudadanos de la ciudad de Buenos Aires. Y, por otro lado, esta nueva falta de cumplimiento de un fallo. Ellos viven repitiendo que defienden el sistema republicano, y tienen prácticamente inhabilitada la Legislatura y no cumplen con las órdenes judiciales”, afirmó Rachid.

Informe: María Julieta Rumi.