Hizo blasón con la ciudadanía común: viajar en subte, mostrar camiseta de Boedo, caminar por la calle como cualquiera. Ahora, el papa argentino Francisco o el papa Francisco argentino, Jorge Mario Bergoglio, siguió con sus hábitos y volvió a sorprender al protocolo, a la curia y a la feligresía cuando pidió renovar su pasaporte nacional “para seguir viajando por el mundo como argentino”, en lugar de aprovechar los beneficios de su ciudadanía vaticana y su pasaporte 001 pontificio.

La decisión la tomó el propio Bergoglio cuando comunicó al embajador argentino ante el Vaticano, Juan Pablo Cafiero, que se le vencía su pasaporte y pretendía renovarlo siguiendo el trámite común y corriente, esto es, poniendo el dedo en el escaneo y el rostro ante la cámara. El documento fue tramitado en la agencia móvil que el Gobierno dispuso en Roma y le fue expedido el viernes pasado.

La información fue provista por el ministro de Interior y Transporte, Florencio Randazzo, de quien depende la emisión de los DNI y pasaportes nacionales. “El papa Francisco quiere seguir viajando por el mundo como ciudadano argentino”, informó Randazzo, quien sostuvo además que los documentos (pasaporte y DNI) le serán entregados en la residencia de Santa Marta, donde vive.

La opción que tenía Bergoglio, la utilizada habitualmente, era la más cómoda: la de utilizar su pasaporte del Vaticano. Por ser jefe de Estado del Vaticano, el Papa tiene la posibilidad de obtener un pasaporte diplomático que –por tradición– lleva el número 001, aunque Bergoglio parece no tener intenciones de utilizarlo. Según la ley que regula la ciudadanía, el acceso y la residencia en el Estado del Vaticano, promulgada en marzo de 2011 por el hoy papa emérito Benedicto XVI, son ciudadanos del Vaticano el pontífice, los cardenales que residen en el Vaticano o en Roma, los miembros del cuerpo diplomático vaticano que están en funciones y otros responsables vaticanos en razón del cargo o del servicio que desempeñan. Claro, no hay forma, por el momento, de que la ciudadanía en el Vaticano sea obtenida por nacimiento.

Randazzo explicó que el pontífice argentino pudo tramitar la documentación en Roma “gracias a la nueva modalidad de trámites digitales que hemos instalado en embajadas y consulados argentinos en 49 países”. Este proceso se viene desarrollando en el marco de un trabajo conjunto entre la cartera de Interior y Transporte y la Cancillería.