El empresario gastronómico Héctor Rolotti, dueño de la cadena de restaurantes Novecento, desapareció en las aguas del río Ganges el lunes pasado, cuando se arrojó para rescatar a una mujer que era arrastrada por la corriente y hasta ayer por la noche se desconocía su paradero. En un comunicado, la cadena Novecento confirmó que Rolotti “se encuentra desaparecido” y que la última vez que fue visto se encontraba en la zona norte del río Ganges, en la ciudad india de Rishikesh, en compañía de su esposa y amigos. “En la costa de ese torrentoso río y junto a un grupo de personas ven a una mujer que era absorbida por un remolino”, por lo cual el empresario y otras personas se arrojaron al agua para intentar rescatarla, explicó el comunicado. “Lamentablemente, Héctor, que era la última persona en el río, fue también llevado por la corriente”, explica el texto, que afirma que familiares y amigos mantienen la esperanza de que aún sea posible encontrarlo “con vida”.

Hasta última hora de ayer no había datos del paradero del empresario. Fuentes de Cancillería informaron que la embajada argentina en India permanece “en contacto con la familia” de Rolotti y “está tratando el tema”. El empresario, de 46 años y padre de cuatro hijos, se encontraba de viaje por India para descansar y realizar prácticas de meditación. Al momento del accidente se encontraba en la ciudad de Rishikesh, ubicada en las cercanías del Himalaya.

El comunicado de la empresa Novecento, una cadena internacional de restaurantes con locales en Estados Unidos, Argentina y Uruguay, detalló que Rolotti es una persona “muy sana, con buena preparación física y con una gran fuerza interior”. “Toda la familia de Novecento alberga aún la esperanza de encontrarlo con vida”, continúa el comunicado en el que la empresa también agradeció “la preocupación de todos los medios, amigos, trabajadores y clientes de nuestra empresa y de la familia Rolotti”.

El empresario Rolotti, de origen cordobés, se encuentra radicado en Estados Unidos, donde abrió el primer local de la cadena en 1991 y donde todavía hoy funcionan dos de sus restaurantes. Los demás locales se encuentran en Buenos Aires (uno en la ciudad y otro en Martínez), Córdoba y Uruguay, donde residen los padres de Rolotti.

Oriundo de La Cumbre, Córdoba, y licenciado en marketing y comercio exterior, el empresario abrió con unos socios un pequeño bar en 1991 en el Soho neoyorquino, antes del gran desarrollo inmobiliario de la zona. El local se diferenciaba por ofrecer café expresso, en lugar del habitual café de filtro, que servían los demás bares de alrededor.

Con el correr del tiempo y la transformación del barrio en un polo gastronómico de la ciudad, el lugar sostuvo su crecimiento y terminó reconvertido en restaurante. A mediados de los ’90, en 1994, con celebridades como clientes y algunos shows de artistas argentinos como ingrediente extra, el restaurante se consolidó y sirvió como punta de lanza para la cadena, que dos años después abrió su primer local argentino en Las Cañitas, en Buenos Aires. A principios de los 2000, tras una breve estadía en Argentina, Rolotti se radicó con su esposa en Estados Unidos, donde nacieron sus cuatro hijos. Instalado en Miami, abrió allí otro local de la cadena en 2002.