SOCIEDAD
› DOCE PRESOS POR EL SECUESTRO DE UN CHICO EN LUJAN
Una banda armada en prisión
El grupo que tuvo 24 días cautivo al hijo de un capitalista de juego en Luján estaba formado por de diferentes penales.
› Por Horacio Cecchi
Doce detenidos, entre ellos una mujer, granadas de guerra, fusiles FAL, una buena cantidad de pistolas, nueve vehículos y 200 celulares fue el resultado de treinta allanamientos (uno de ellos en ámbitos porteños) vinculados al secuestro de Facundo Laffont, el hijo del “Lujanero”. Pero lo que más interesó a los investigadores fue el rescate de unos dos mil dólares y otros tantos pesos autóctonos utilizados para el pago del rescate, todos con su correspondiente marcado. En Moreno, uno de los detenidos resistió a los tiros hasta entregarse. La banda estaba integrada por evadidos de diferentes penales. “Tenían buena infraestructura, eran expertos en secuestros y sospechamos que participaron en algún caso resonante”, reveló a Página/12 un investigador.
El 19 de mayo pasado a las 7.30, Facundo Laffont, de 14 años, fue secuestrado cuando se dirigía al colegio en el auto del padre de un compañero, en la esquina de España y Sarmiento, Luján, y a una cuadra de su casa. En ese momento, los delincuentes ya tenían perfectamente marcada a la víctima. Lo sacaron del vehículo y al padre del compañero le dejaron un papelito con un mensaje bien directo y comprensible: “Queremos un millón de dólares”. El mensaje también había sido cuidadosamente sopesado. Su destinatario era el padre de Facundo, Roberto Laffont, más conocido como “el Lujanero”, en una oportunidad procesado como capitalista de juego clandestino por el juez platense César Melazo.
Durante 24 días se sucedieron llamadas, dos pagos frustrados y negociaciones llevadas adelante por el mismo Lujanero, negociaciones que concluyeron con un rescate acordado en 243 mil pesos, entre billetes locales y de los verdes. El 12 de junio, a las 6.15, tras el pago del rescate en Campana, Facundo fue liberado en Merlo.
Ayer, investigadores de la DDI de General Rodríguez, a cargo del comisario Sergio Vargas, y hombres de la Brigada Antisecuestros dirigida por Angel Casafús, realizaron 30 allanamientos en Capital Federal, Campana, Moreno, Merlo, Zona Sur y Rafael Calzada. Resultado: doce detenidos. Según Vargas, “todos tienen antecedentes, unos cuantos son evadidos de penales, allí se fueron conociendo”. De acuerdo a los datos recogidos durante la investigación, aunque el secuestro de Laffont tuvo lugar en Luján, la banda actuaba en el eje Campana-José C.Paz. “Al chico lo secuestraron porque les resultó fácil hacer la inteligencia del padre -reveló un investigador–. Es muy conocido, tiene mucha plata, todos los vecinos hablan de él.”
El haberse conocido en penales explica que los integrantes de la banda pertenezcan a diferentes zonas. Por eso, los allanamientos tuvieron objetivos tan distantes. Uno de ellos ocurrió en Quesada al 1700, en el barrio de Núñez. Otros en Campana, donde Raúl Laffont, hermano del Lujanero, arrojó la bolsa con el rescate desde la última ventanilla de un tren que se dirigía a Zárate. También en Merlo, donde el chico fue liberado. Y en Parque San Martín-Moreno, donde un tal “Monchi” y su mujer fueron detenidos tras una resistencia de cinco disparos sin consecuencias.
En los allanamientos fueron secuestradas un FAL, ocho pistolas 9 milímetros, pistolas calibre 40, un fusil Remington de precisión, revólveres de calibre menor, tres granadas, 5 mil municiones, ocho chalecos antibala, cuatro chalecos y una gorra de la Bonaerense, nueve vehículos, 200 teléfonos celulares, dos mil pesos y dos mil dólares, todos billetes marcados. “Faltan dos –confió un investigador–. Pero cayeron los que apretaron al chico, los que hicieron las llamadas, los que lo cuidaron y los que cobraron.”