Habitantes de distintas villas porteñas cumplieron ayer el tercer día consecutivo de acampe al lado del Obelisco con una huelga de hambre, en reclamo de la urbanización de asentamientos y la declaración de la “emergencia habitacional” en la ciudad de Buenos Aires. “Ningún funcionario del gobierno de Mauricio Macri tomó contacto hasta el momento con nosotros”, sostuvo Dora Mackoviak, vecina de la Villa 31 Bis e integrante de la Corriente Villera Independiente, organización que impulsa el reclamo. La protesta en la Plaza de la República comenzó el lunes al mediodía con el armado del campamento y una conferencia de prensa donde unos 500 habitantes de 17 villas de la Ciudad se hicieron presentes. Ocho de ellos iniciaron una huelga de hambre líquida que finalizará el viernes, cuando otro grupo realice la misma medida.