SOCIEDAD › EL ARZOBISPO RESPONDIó A LOS REPUDIOS POR SUS DICHOS SOBRE LA HOMOSEXUALIDAD
El prelado de La Plata salió a bajarles el tono a sus expresiones sobre la comunidad gay, pero volvió a la carga contra el matrimonio igualitario. Desde la CHA consideraron que “si Aguer quiere hacer una aclaración, que reconozca su error y pida disculpas”.
Después de los repudios que cosechó por sus dichos en torno de la homosexualidad, el arzobispo de La Plata, Héctor Aguer, se pasó el día buscando aclarar que cuando usó la palabra “abominación” no se refería a las personas de esa orientación sexual sino a la “profanación del templo” que significó la filmación subrepticia, allí, de un video protagonizado por La Tigresa del Oriente, una cantante de estilo provocador. De todos modos, el prelado se mantuvo en sus trece a la hora de criticar los avances en los derechos de gays y lesbianas: insistió en su postura contraria al matrimonio igualitario y dijo que se trata de una ley “injusta” que “desgraciadamente” existe en el país. Desde la Comunidad Homosexual Argentina salieron al cruce del intento de aclaración: “No se puede escapar tan fácilmente de lo que dijo. Si realmente quiere aclarar algo, que reconozca que se equivocó y que pida disculpas”, sostuvo el presidente de la entidad, César Cigliutti, a .
Aguer emitió ayer un comunicado y dio varias entrevistas luego de la polémica instalada con las organizaciones de la diversidad sexual que, junto a la delegación bonaerense del Inadi, habían repudiado el martes las declaraciones del arzobispo en la homilía del domingo, en las que, denunciaron, se refirió a la homosexualidad como “abominaciones amparadas por las leyes”. También sostuvieron que se había referido a las personas homosexuales como “depravadas” y “descaminadas”.
El origen del contrapunto se remonta a un video que filmó en la Catedral de La Plata la Tigresa del Oriente, junto a una travesti de esa ciudad. La filmación se realizó clandestinamente y se conoció cuando comenzó a circular por Internet.
El domingo pasado, Aguer presidió una misa en ese templo y allí aludió al video: dijo que se trataba de una “blasfemia” y vertió los conceptos que generaron las críticas desde la comunidad homosexual.
Ayer manifestó en un comunicado que sus expresiones estuvieron dedicadas al “atentado perpetrado” en el templo: dijo que con la palabra “abominación” había aludido a la filmación del video y no a la comunidad homosexual.
“Como se ha difundido ampliamente por los medios –sostuvo Aguer–, en la Catedral de La Plata ocurrió un hecho gravísimo que yo califiqué de abominable. Se trata de la profanación del templo, donde se filmó un video en el que aparecía una mujer que se hace llamar La Tigresa del Oriente, vestida de modo indecoroso, que cantaba y bailaba. Hizo un remedo ofensivo de la confesión y de la Eucaristía; otra persona, que según dicen era un hombre vestido de mujer, daba la comunión a la Tigresa, la que cantaba estrofas blasfemas, de carácter erótico sobre el cuerpo de Cristo.”
“Lamentablemente –continuó–, los signos religiosos, la fe y los sacramentos no están protegidos por las leyes de eventuales atentados. No se toma en cuenta la sensibilidad de los fieles católicos. En el caso de la iglesia de San Ignacio, en Buenos Aires, los jóvenes son procesados por vandalismo contra un monumento nacional, no por la ofensa cometida contra el lugar sagrado.”
Aunque en el comunicado quiso bajarle el tono a la polémica, en las entrevistas posteriores no se privó de desnudar su verdadero pensamiento: volvió a apuntar contra los derechos y las leyes que amparan a la comunidad homosexual, al señalar que existen “desgraciadamente, porque la Iglesia está en contra del matrimonio igualitario. Es una ley injusta porque va en contra del orden natural, no sólo contra la posición de la Iglesia”. “Estoy juzgando objetivamente lo que ocurre en Argentina, y otros países también, que se llama matrimonio a lo que no lo es. A lo que nosotros no podemos llamar matrimonio aunque lo diga la ley. Se trata de una doctrina de la Iglesia fundada en el orden natural”, agregó.
Cigliutti consideró que “no se puede hacer una supuesta rectificación y al mismo tiempo criticar el matrimonio igualitario. Aguer sigue discriminando y fomentando la violencia con sus expresiones”. “Y no hay que ser lingüista para desentrañar que los dichos en la misa estaban destinados a nuestra comunidad. Fue muy claro lo que dijo: no se refirió exclusivamente a la filmación. Si ahora quiere aclarar, que reconozca su error y pida disculpas”, sostuvo.
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