David Benítez, el joven de 24 años acusado de abuso sexual contra una niña de 12 años, declaró ayer durante cinco horas abte el fiscal Marcelo Fuenzalida, admitió que tuvo relaciones sexuales con la nena, dijo que la había conocido ese día y aseguró que “creía que tenía 17 años” y no 12. Benítez quedó detenido y ahora el juez debe resolver si le dicta la prosión preventiva.

En tanto, la madre del acusado sostuvo que su hijo pasó la noche con la chica en su casa, dijo que la presentó como “su novia” y que por su contextura física no sospechó que tenía sólo 12 años. El padre de la chica aseguró a los medios que “mi hija no tenía contacto con el chico y lo sé porque le controlábamos el Facebook”.

La indagatoria se realizó en la Unidad Funcional de Instrucción de Violencia de Género y Delitos Conexos a la Trata de Personas de San Isidro, ubicada en Ituzaingó 147. El imputado, David Benítez, de 24 años, fue indagado por el delito de abuso sexual con acceso carnal.

Los padres de la niña habían radicado la denuncia por la desaparición el martes último a las 20.30, casi una hora y media después de que la chica desapareciera.

El miércoles por la noche, el fiscal encabezó un allanamiento en la casa de la villa La Cava donde vive Benítez y donde se cree que la niña permaneció durante su desaparición. El fiscal y la policía secuestraron, allí, prendas de vestir, sábanas y otros elementos de interés para la causa.

Precisamente ayer, la madre de Benítez sostuvo que su hijo presentó a la adolescente como “su novia” y dijo que por su contextura física no sospechó que tenía sólo 12 años. “Cocinaron, tiraron colchones en el suelo y pasaron la noche”, sostuvo en declaraciones a la prensa. La mujer dijo que al día siguiente su hijo y la adolescente se levantaron, desayunaron y “salieron para ir a Tecnópolis”. Al mediodía del miércoles, la policía encontró a la chica en una parada de colectivos, acompañada por el joven que de inmediato fue detenido y luego acusado de abuso sexual agravado.

El padre de la chica negó conocer a la madre y a la familia del acusado. El hombre insistió en que “por la edad que tiene mi hija fue obligada y retenida” por el joven. El hombre informó además que su hija “recibió una batería de remedios muy fuertes” y agregó que “no tiene golpes visibles” en el cuerpo.