El joven, suizo él, estaba de vacaciones en Santiago del Estero desde hace dos semanas. Gerald Mayol Sandre Laury, de 22 años, dice ser integrante de una ONG ambientalista. El lunes pasado entró al zoológico municipal San Francisco de Asís, de la capital provincial, decidió poner en práctica sus consignas a favor de la ecología y abrió la jaula de las aves. Decenas de ellas partieron rumbo a la libertad. El terminó preso.

En la noche de ese día, el joven se dirigió a una jaula de grandes dimensiones del zoológico, que albergaba a una importante cantidad de pájaros, muchos de ellos autóctonos, para liberarlos. La seguridad del establecimiento advirtió que las aves habían sido liberadas y dio aviso a la policía. Horas después fue localizado y detenido en el camping público Las Casuarinas.

La primera sospecha era que había robado los ejemplares para comercializarlos, pero después se aclaró que los había liberado porque considera que las aves no deben permanecer en cautiverio.

En el caso tomó intervención la Embajada de Suiza en la Argentina, que a través de un llamado telefónico de un asesor legal, Mauricio De Núñez, contrató a un abogado local, Javier Leiva, para que defienda al acusado.

Luego de brindar su primera declaración en la comisaría primera, el hombre fue liberado, pero su situación procesal debe ser resuelta por la jueza en lo Criminal y Correccional de Primera Nominación, Lucrecia Martínez Llanos, quien le imputó el delito de daño en perjuicio de la municipalidad de la capital.

Al concederse la excarcelación anticipada, la magistrada estableció algunas reglas de conducta y que fijara residencia transitoria en esta ciudad, por lo que no puede abandonar la provincia sin la anuencia de la Justicia.

Cuando fue detenido, Sandre Laury se identificó ante la policía como miembro de Greenpeace. Pero portavoces de esa organización ecologista consultados por la agencia española EFE aseguraron que el detenido no pertenece ni a Greenpeace de Argentina ni de Suiza.