Luego de la denuncia de un ex funcionario porteño por agresiones en una playa de infractores –hecha pública el domingo pasado en Página/12– y después de que el gobierno porteño reconociera a dos agresores a través de las cámaras de seguridad del predio de la empresa Dakota-STO (Sistema de Tránsito Ordenado), se ordenó que se separara a los empleados. A modo de protesta, los trabajadores de la concesionaria lanzaron una medida de fuerza y no levantaron vehículos en infracción.

El Sindicatos de Camioneros aseguró que los dos empleados despedidos que acarrearon un auto mal estacionado y protagonizaron un incidente con su propietario, Oscar Feito, ex secretario de Medios de la Ciudad de Buenos Aires, fueron agredidos verbalmente y “escupidos” por el infractor. En diálogo con este diario, Feito contestó: “Que muestren la cinta, ahí se ve todo lo que pasó”.

“Vamos a tomar las medidas necesarias para que estos compañeros sean reincorporados y esperamos que la empresa (de grúas) STO tome cartas en el asunto también con todo lo que es seguridad para los compañeros de la rama, que son agredidos a diario”, indicó el gremio en un comunicado de prensa.

Por su parte, Feito exigió que el gremio muestre el video donde se registró la pelea. También señaló que “ayer (por el lunes) me llamaron el ministro de Transporte y el presidente de la empresa concesionaria y me pidieron disculpas. Los dos habían visto el video de las cámaras de seguridad y coincidieron en que fue una barbaridad lo que pasó”.

El viernes por la noche, en la playa de secuestros de Dakota-STO en Figueroa Alcorta y Pueyrredón, junto a la Facultad de Derecho, el ex funcionario fue agredido por “varios empleados de la empresa STO, ante la pasividad de un agente de seguridad privada y de un policía de civil”.

Después del episodio, radicó una denuncia por lesiones en la Comisaría 19ª de la Policía Federal. En los próximos días, denunciará a la empresa ante la Justicia porteña. “El presidente de la empresa me dijo que iban a separar de sus puestos a los empleados y me ofreció juntarnos a tomar un café para charlar sobre lo que había pasado”, indicó Feito.

Feito detalló que “el ministro me dijo que iban a iniciar un sumario a los empleados y pedirle explicaciones a la empresa. Me importaba que les llegara el video porque para mí fue muy grave que me pegaran en un lugar público, donde en teoría tendría que haber habido seguridad que me protegiera”.