Un puente en riesgo obligó ayer a cortar la Autovía 2, que comunica la Ciudad de Buenos Aires con la costa, a la altura de Castelli. Dada la gran cantidad de autos que circulaban por el fin de semana largo y la proximidad del cambio de quincena, se desvió el tránsito a rutas alternativas.

Los problemas se generaron después de que la Dirección de Vialidad Provincial detectara el jueves una fisura en una viga del Puente del Guerrero, sobre el río Salado, a la altura del kilómetro 167 de la autovía. Tras un descenso de 20 centímetros en uno de los pilares que sostienen el puente, las autoridades decidieron interrumpir en forma preventiva el tránsito, solamente en dirección a la Capital Federal.

Desde la madrugada de ayer, móviles y agentes de la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV) llevan a cabo un operativo para encauzar el tránsito sobre el kilómetro 179,5 y 184 de la Autovía 2. El desvío se da por la ruta provincial 41 hasta Pila y desde allí a la ruta provincial 57 hasta Lezama, para retomar nuevamente la Autovía 2.

El corte y desvío obligaron a los automovilistas a recorrer 70 kilómetros de más para llegar a la Capital desde los balnearios de la costa atlántica. En sentido inverso se podía circular con normalidad.

El caudal de tránsito en esa dirección era a las 16.30 de ayer de 1504 vehículos por hora, a la altura del peaje de Samborombón. En tanto, el municipio de Lezama informó que a partir de hoy y durante el fin de semana largo, por los feriados de Carnaval, se prevé habilitar uno de los carriles de la Autovía 2 con dirección a Mar del Plata para ser utilizado en sentido a la Capital.

Especialistas de Vialidad Provincial, la concesionaria Autovía del Mar y de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) trabajaban sobre la estructura del puente para determinar el grado de afectación y con el fin de proceder luego a su reparación. “Es importante destacar que el gobierno provincial ya intimó a dar inicio a una investigación rigurosa para determinar los motivos de dicho incidente en el puente”, afirmaron las autoridades viales.

En septiembre de 2012, en el inicio de otro fin de semana largo, hubo más de 15 kilómetros de congestión vehicular por un desvío similar, y el puente estuvo más de un mes inutilizable por su reparación.