Estudiantes, padres y docentes de las ocho escuelas de la ciudad de Buenos Aires que permanecen tomadas pidieron a los diputados de la Comisión de Educación de la Legislatura porteña que gestionen una reunión con el ministro del área, Esteban Bullrich, para avanzar en una salida a su reclamo por mejoras en los edificios escolares, a la vez que denunciaron persecución policial a alumnos.

Las comunidades educativas de las escuelas en conflicto, en tanto, rechazaron la decisión de la cartera escolar de “mandar una directiva a los rectores de los colegios tomados de llamar a la policía para que levanten actas contravencionales a alumnos que participan de la medida”, tal como lo relató una representante del Mariano Acosta.

Malena, alumna de esa escuela, afirmó que ayer “dos policías que fueron llamados por la rectora entraron al edificio y pidieron datos, como el DNI, de estudiantes que son menores de edad”.

Frente a la denuncia, un grupo de padres, entre ellos los de alumnos del Rogelio Yrurtia, situado en Alberdi al 4700, anunciaron la presentación de un “hábeas corpus preventivo” en defensa de los estudiantes que permanecen en el colegio para sostener las tomas.

Las escuelas Julio Cortázar, el Lengüitas y el Mariano Acosta se sumaron esta semana a la medida de fuerza que protagonizan, en algunos casos desde hace dos semanas, los colegios artísticos Lola Mora e Yrurtia, la de danza Aída Mastrazzi, la escuela técnica Fernando Fader y la Escuela de Cerámica 1.