Si bien continúa con acumulación de agua, piedras y barro, Gendarmería Nacional informó que el Paso Internacional Cristo Redentor –que une a Mendoza con Chile– fue reabierto ayer minutos antes del mediodía, tras haber sido inhabilitado el domingo como consecuencia de dos aludes que cayeron sobre la Ruta Nacional 7, a la altura de La Yesera.

Mientras operarios y máquinas de la Dirección Nacional de Vialidad (DNV) trabajaban en el despeje de la calzada del principal paso fronterizo que atraviesa la Cordillera de los Andes, una larga cola de vehículos esperaba poder dejar el país trasandino, donde muchos turistas –especialmente oriundos de Mendoza– habían concurrido a festejar las fiestas navideñas, aprovechando el fin de semana largo.

El corte abarcaba una franja desde el complejo aduanero de Horcones hasta el Hotel Uspallata, lo que produjo un enorme congestionamiento vehicular en el Paso Fronterizo Los Libertadores, de Chile, y en el mendocino Uspallata, indicaron desde el Escuadrón 27 de Gendarmería Nacional,

Por las altas temperaturas registradas, un comunicado de Gendarmería informó que se produjo un aumento del caudal de los cursos de agua a causa de los deshielos, produciéndose dos aludes en el sector de la Curva del Yeso, cercana al complejo Horcones. Por tal motivo, el domingo la Ruta Nacional 7 se tornó intransitable y tuvo que ser cerrada.