El fiscal porteño Martín Lapadú solicitó al Ente Nacional de Telecomunicaciones el bloqueo de las plataformas digitales a través de las cuales se accede al sistema Uber de traslado de pasajeros. La fiscalía pidió la medida en el marco de la investigación por el supuesto uso indebido del espacio público con fines de explotación comercial por parte de la empresa que une conductores particulares con pasajeros a través de una aplicación móvil y que comenzó a operar el 12 de abril. Los taxistas harán mañana una nueva protesta contra su funcionamiento.

La investigación la abrió de oficio la Unidad de Investigaciones Complejas, a cargo de los fiscales Lapadú y Roberto Néstor Maragliano, al advertir que Uber comenzó a operar “sin pedir autorización al gobierno porteño para su funcionamiento y desarrollo”.

El fiscal Lapadú solicitó una medida cautelar al Ente Nacional de Telecomunicaciones, la dependencia encargada de que se arbitren los medios necesarios para bloquear la aplicación y el acceso al sitio web.

“Ha quedado demostrado que la empresa organiza una actividad lucrativa en la vía pública para la cual no tiene la habilitación correspondiente ni registra solicitud de trámite alguna. La medida cautelar del bloqueo de la página web y de la app resulta ser el medio más idóneo para hacer cesar la continua y permanente contravención en que se sigue incurriendo”, fundamentó el fiscal.

Lapadú destacó “el riesgo para la seguridad vial que significa el transporte de pasajeros sin el correspondiente registro profesional, así como la falta de los seguros para cubrir accidentes”.

La medida se suma a los allanamientos realizados el viernes en la sede de la empresa, en los que se recolectó evidencia para avanzar en la investigación.

Los fiscales entendieron que “la empresa no cumple con la vasta legislación que regula la actividad lucrativa de transporte de pasajeros en el espacio público, cuyos requisitos hacen a la seguridad de los pasajeros, al uso del espacio público y a cuestiones tributarias, entre otras”.

La fiscalía advirtió que Uber infringe los artículos 6.1.73 y 6.1.74 de la ley 451 de faltas, que sanciona con multas a aquellas empresas de radio taxi que funcionen sin habilitación, y a quien asigne viajes requeridos por vía telefónica y por telefonía móvil de manera no autorizada.

A última hora de ayer, la empresa emitió un comunicado en el que manifiesta que “se encuentra analizando la medida cautelar recientemente comunicada y brindará más información una vez que nuestro equipo haya evaluado la situación”.

En tanto, los choferes de taxis confirmaron que se concentrarán mañana a las 11 en el Obelisco, para repudiar el funcionamiento de Uber. Luego de una concurrida asamblea en el Sindicato de Peones de Taxi, Claudio Palmeyro, miembro del Consejo Directivo de la organización, anunció la movilización de mañana al Obelisco. “Queremos manifestar nuestra preocupación por los distintos incidentes que se están registrando en la calle y responsabilizamos a la empresa Uber y a sus representantes por esta situación, ya que no solamente ignoran a los taxistas sino también al Gobierno de la Ciudad y a la Justicia, pasando por arriba de tres poderes que hacen una república”, señaló el también legislador porteño del bloque Peronista.

Luego de las protestas en su contra y un fallo del tribunal en lo Contencioso, Administrativo y Tributario número 15 que ordenó al Ejecutivo de la ciudad “tomar medidas” para que Uber cese el funcionamiento de manera “inmediata”, la empresa había anunciado la semana pasada que los usuarios podrían viajar gratis hasta mañana.

“Esta es una provocación, es la manera en la que esta empresa se instala en las ciudades: provocando”, sostuvo el dirigente, y advirtió que “además es una mentira que los viajes sean gratis, lo que pasa es que las tarjetas de crédito, por tratarse de un negocio que no está habilitado, no le están tomando las transacciones”.

Durante la asamblea, a la que concurrieron representantes de todas las cámaras empresarias representativas del sector, se votó por “hacer una protesta el miércoles que viene (por mañana) al Obelisco, que sólo se suspenderá si la empresa anuncia que deja de funcionar”.

Palmeyro remarcó que “el Gobierno de la ciudad dice que no puede funcionar (Uber) del modo en que lo vienen haciendo, incluso hay numerosos controles en la vía pública y se están remitiendo vehículos”.

“La Justicia expidió un fallo que le pide al Ejecutivo de la ciudad que prohíba que siga funcionando; el jueves pasado la Legislatura manifestó el repudio a esta empresa por la forma ilegal en la que funciona, incluso el presidente de la Nación planteó que está de acuerdo con lo que planteamos nosotros y que hay que cuidar a los taxistas, y hacen oídos sordos a todo esto”, concluyó.

“Con esta aplicación peligra realmente nuestra fuente de trabajo”, señaló uno de los taxistas, identificado como Jorge, y aseguró que a diferencia de los coches de Uber, ellos deben “cumplir con rigurosos controles, tenemos gastos mayores a los de un auto particular”.

Asimismo, afirmó que “en otros países, como Brasil o Uruguay, cuando uno quiere comprar un auto para trabajar de taxista te hacen un descuento del 35 por ciento en el costo del vehículo. Sin embargo acá no es así”.