Más de mil celulares robados resultaron secuestrados tras un operativo realizado en distintos negocios de Once y en la Villa 31, en la Capital Federal. En los procedimientos, la policía detuvo a unas 28 personas, acusadas de integrar una banda internacional dedicada al robo y venta de esa telefonía.

El jueves, la Brigada de Investigaciones de la Policía Metropolitana realizó el allanamiento a una casa de la Villa 31, donde fueron incautados 25 celulares robados y resultaron detenidas dos personas, quienes quedaron a disposición de la Justicia. Poco después, personal de la misma Brigada y del Departamento Operaciones Urbanas de Contención y Actividades Deportivas (Doucad) allanaron en forma simultánea 36 locales ubicados en dos galerías de la avenida Corrientes al 2300. En esos comercios dedicados a la venta de teléfonos móviles y accesorios, fueron secuestrados cerca de mil aparatos, 572 tarjetas SIM, varios GPS, discos rígidos, tres equipos para clonar celulares, 6 tablets y distintos elementos para desbloquear celulares, todos elementos que fuentes policiales identificaron como producto de diversos ilícitos.

En los procedimientos resultaron aprehendidas 22 personas oriundas de Perú, cinco argentinos y un paraguayo, todos acusados de integrar una banda internacional dedicada al robo y venta de celulares. Los detenidos fueron puestos a disposición de la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional 7, y del Juzgado 6, a cargo del Rodolfo Canicoba Corral.

El ministro de Justicia y Seguridad de la Ciudad de Buenos Aires Martín Ocampo dijo que “con operativos como estos se ataca a la matriz de ese delito, que se nutre de la reventa”. El funcionario también destacó que “el Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom) emitió una resolución que limita la conexión de equipos robados en la red de telefonía móvil, para que los equipos denunciados por los usuarios a las empresas queden bloqueados y su reinserción al mercado sea más dificultosa”.