SOCIEDAD
› LO OCUPABAN OCHENTA FAMILIAS QUE PERDIERON TODO
Un galpón convertido en cenizas
“De pronto, escuché gritos, ... agua, ... agua... traigan agua, salí hasta el pasillo y vi las llamas, pero en lugar de bajar hacia la calle subimos al tercer piso. Las llamas tomaron el chapadur y los cartones de las divisiones y de pronto nos encontramos cercados”, relató Zoida Yarán, una de las habitantes de la fábrica abandonada que se incendió ayer a la madrugada en el barrio porteño de Palermo. El predio era ocupado por unas 80 familias. Lograron escapar sin sufrir daños de gravedad, pero perdieron todas sus pertenencias. Ante esta situación, el Gobierno de la Ciudad dispuso su traslado temporario a un centro comunitario, mientras gestionará créditos y subsidios para que se puedan establecer en viviendas definitivas.
“No pudimos sacar nada de lo nuestro porque al volver hacia el pasillo caían restos de cartón y de madera encendidos y también empezó a caer mampostería”, contó Ramón Acosta. Todavía se desconocen las causas del incendio. Se desató poco después de la medianoche, en un galpón que perteneció a la ex fábrica Eslabón de Lujo, ubicado en la calle Darwin al 1300, entre la avenida Córdoba y Niceto Vega. Las llamas sorprendieron a la mayoría de los ocupantes mientras dormían. Para apagarlas, trabajaron durante casi seis horas nueve dotaciones de Bomberos. El jefe de Gobierno, Aníbal Ibarra, anunció que el lugar será convertido en un espacio público. Los habitantes –unos 250, entre ellos gran cantidad de niños– fueron reubicados en el ex Mercado Comunitario, en la esquina de avenida Dorrego y Freire. Ibarra explicó que con los damnificados “se utilizará la misma operatoria que (con los residentes de la ex) Padelai, a quienes se les dio un subsidio no reintegrable de 15 mil pesos o un crédito a 20 años de 30 mil”. Para asistir a las víctimas, la ministra de Desarrollo Social, Alicia Kirchner, envió pañales y colchones.