El gobierno porteño salió a jugar fuerte en la competencia para atraer a los turistas extranjeros: con el slogan “Buenos Aires Conviene”, lanzó en estos días una campaña de afiches en las ciudades brasileñas de San Pablo, Curitiba, Belo Horizonte, y en Santiago de Chile, con el fin de tentar a los que quieren hacer turismo más económico. El eje de la campaña será el producto cultural que identifica a la ciudad: el tango. Según estimaciones, el 70 por ciento de los extranjeros que vienen a la Argentina consumen la música popular porteña. Con el dólar rondando los tres pesos, la Argentina –y especialmente Buenos Aires– pasó de ser uno de los lugares más caros del mundo a ser un sitio conveniente. La campaña fue lanzada por la Secretaría de Desarrollo Económico, que contrató la colocación de 670 carteles translumínicos en las ciudades brasileñas y en la capital chilena, durante 15 días. Sus efectos no se verán durante la Semana Santa, por sí podrían notarse en los meses que vienen. De todas formas, la ciudad espera para este fin de semana largo un 50 por ciento más de turistas –extranjeros y nacionales– que el año pasado, y ya se sabe que las reservas realizadas hasta el momento alcanzan el 75 de la capacidad hotelera de la ciudad. Las autoridades porteñas creen que el turismo puede ser una tabla de salvación frente a la caída de la recaudación tributaria, al generar ingresos por la venta de bienes y servicios a los visitantes.