En las farmacias se recibieron, hasta ayer, listas de aumentos para 8000 medicamentos y en lo que resta de la semana la nómina “se completará hasta llegar a los 12.000 productos”, informaron a Página/12 voceros de las cámaras farmacéuticas. La demora en la actualización de los nuevos precios sigue provocando problemas en el normal abastecimiento en las bocas de expendio, situación que se mantendrá por lo menos hasta el martes. En las farmacias está suspendida la venta de medicamentos a los usuarios de obras sociales e incluso de las prepagas, problema que podría extenderse más allá del martes si continúa la incertidumbre en torno de la suba del dólar y la posibilidad de nuevos incrementos en los precios. El ministro de Salud, Ginés González García, consideró que hubo “una actitud un poquito salvaje” por parte de los actores en la cadena de comercialización, pero puso el énfasis “sobre todo en la actitud de las farmacias” y ubicó en segundo término “a algunos fabricantes que determinaron los incrementos”.
González García, que salió a hacer declaraciones luego de dos días de caos en torno del abastecimiento en farmacias, insistió en que la llamada “canasta de medicamentos”, acordada con los industriales para mantener a precios de diciembre una lista de 216 productos, “no se va a modificar en cuanto a los costos, aunque en muchos casos no se ha venido respetando lo convenido y algunos hasta llegaron a decir que no tenían conocimiento de lo que se había acordado”. El ministro interpretó que hubo “una especulación por el incremento en otros productos que no están dentro de la canasta” y que eso llevó “al cierre de farmacias por la histeria que provocó la subida del dólar”.
El presidente de la Federación Argentina de Cámaras de Farmacia, Gilberto Videla, admitió que “los cierres repentinos” como los producidos en los últimos días “no son legales” dado que “la farmacia, para cerrar, inclusive en vacaciones, tiene que avisar con anticipación al ministerio para reprogramar los turnos”. De todos modos, refutó la responsabilidad del sector en los aumentos porque “la farmacia es el último eslabón de la cadena” y fueron “los laboratorios los que programaron este aumento de entre el 30 y el 40 por ciento”.
Daniel Alvarado, de la Confederación Farmacéutica Argentina, precisó a este diario que hasta ayer por la tarde “entraron ocho mil productos con un 35 por ciento de aumento promedio”, a la vez que aclaró que “los 200 productos que integran la canasta básica acordada con el Gobierno no han aumentado en absoluto”. De todas maneras, el propio Alvarado reconoció que “de las 12.000 farmacias adheridas que tenemos en el país, el 80 por ciento ya no atiende a las obras sociales” y un 40 por ciento de ellas “está a punto de cerrar porque no pueden hacer frente a los resúmenes de pago de las droguerías”.
Carlos Villagra, de la Asociación de Farmacias Mutuales y Sindicales, sostuvo que hasta el fin de la semana “van a seguir llegando listados hasta completar los aumentos de 12.000 productos”. Estimó que los nuevos aumentos “pulverizan la canasta de medicamentos” acordada entre el Gobierno y los laboratorios para congelar los precios al nivel de diciembre por un plazo de hasta 90 días. Según Villagra, desde enero hasta ahora “los medicamentos de consumo masivo aumentaron un 40 por ciento”, pero advirtió que hubo otros incrementos que afectan a los usuarios.
“En ortodoncia, el aumento de los productos llegó al 300 por ciento, en óptica al 200 por ciento y en odontología al 290 por ciento”, afirmó Villagra. Fuentes allegadas a las cámaras farmacéuticas reconocieron que la suspensión de las obras sociales “puede prolongarse en el tiempo, porque las farmacias no pueden seguir absorbiendo el costo de las prestaciones si continúa la virtual cesación de pagos de la mayoría de las asociaciones sindicales”.
El ministro González García se manifestó “muy decepcionado por las actitudes individuales, en algunos casos muy salvajes, que están provocando el desabastecimiento” en farmacias. En ese sentido, insistió enque pedirá al Ministerio de la Producción la aplicación de las sanciones previstas en la Ley de Abastecimiento. Esa medida fue requerida por la Defensora del Pueblo de la Ciudad, Alicia Oliveira, quien sostuvo que debe intervenir la Justicia “para, de ser necesario, hacer allanamientos y decomiso de los medicamentos” en laboratorios y droguerías.