El record turístico de Semana Santa ahora tiene cifras: más de dos millones de personas que –según la Secretaría de Turismo y Deportes de la Nación– disfrutaron del fin de semana superlargo en algún punto del país gastaron alrededor de 1000 millones de pesos. Solo a la ciudad de Buenos Aires llegaron 342.650 turistas –de los cuales el 32 por ciento fueron extranjeros–, que gastaron en total unos 35 millones de pesos. La capacidad de los hoteles porteños estuvo cubierta en un 70 por ciento promedio, con un pico del 77 por ciento el viernes y sábado, aunque en algunos destinos, como Mendoza, Iguazú, Colón, Villa la Angostura, Tandil y Bariloche, la ocupación llegó al 100 por ciento de las plazas.
La estrella de la Semana Santa fue el turismo proveniente del exterior: con la nueva paridad cambiaria, la Argentina pasó de ser uno de los países más caros a convertirse en uno de los más convenientes. Se notó en la ciudad de Buenos Aires, donde el número de visitantes extranjeros fue un 120 por ciento mayor que el año pasado. A esa ventaja apostó el gobierno porteño, que la semana pasada lanzó una campaña de promoción en tres ciudades brasileñas (San Pablo, Curitiba y Belo Horizonte) y en Santiago de Chile, que “continuará a lo largo del año, especialmente en los fines de semana largos de los países vecinos y en las vacaciones de invierno”, anunció a Página/12 el secretario de Desarrollo Económico porteño, Eduardo Hecker.
El movimiento en las rutas también fue un indicador que marcó récords: en la provincia de Buenos Aires, para alegría de las concesionarias de peaje, se movilizaron un total de 699.800 vehículos, que transportaron a 2.978.480 personas. Casi un millón más que en la Semana Santa del 2001, según informó el Ministerio de Seguridad de la provincia.
Mar del Plata fue una de las estrellas del fin de semana largo: hubo 239.556 turistas estables, la marca más alta de los últimos años para Semana Santa. Según los cálculos del Ente Municipal de Turismo, cada familia tipo gastó en promedio 533,30 pesos. La ocupación hotelera varió entre el 93 y el 100 por ciento, de acuerdo con la categoría del alojamiento.
En Córdoba, la agencia local de turismo también habla de “record histórico”, con 533.268 turistas, que dejaron 130 millones de pesos, un 30 por ciento más que hace un año. A las Cataratas del Iguazú llegaron 7500 visitantes. Y a la provincia de Salta llegaron unos 20.000 turistas, que gastaron 4,5 millones de pesos, según estimaciones locales.
Donde se pudo medir la incidencia del turismo extranjero fue en la ciudad de Buenos Aires: de las 110.000 personas que llegaron del exterior, la mayoría vino desde el Uruguay: el 44 por ciento; en segundo lugar estuvieron los chilenos, con el 16 por ciento, y luego los brasileños, con el 14. Un 10 por ciento llegó de Europa y los Estados Unidos. El fenómeno fue importante no sólo para los hoteleros sino para los comerciantes: los turistas hicieron muchas compras, especialmente en los rubros de marroquinería y calzado.