SOCIEDAD
› CANCELAN VUELOS Y SE QUEDAN SIN ALOJAMIENTO
En Chile, 150 varados de AA
El bajo cero que marcaba el termómetro, en Santiago de Chile, tuvo derivaciones extramercuriales: quedó inhabilitado el aeropuerto local, con lo que los vuelos de Aerolíneas Argentinas con destino a Buenos Aires, correspondientes al fin de semana, fueron suspendidos. El resultado es que unos 150 pasajeros quedaron varados en la capital chilena. Pero, según una versión, los varados no fueron alojados por la empresa en hoteles para pasar el mal rato. Las protestas de los pasajeros recalentaron el ambiente, al menos en lo que se refiere a la sensación térmica. En cambio, un vocero de la empresa, consultado por este diario, negó “rotundamente” que no los hubieran alojado “pese a que la demora no es responsabilidad nuestra. Es una burda mentira”, apuntó la misma fuente.
“Chile está muy complicado porque está bajo cero”, reveló el vocero de la empresa. La baja temperatura obligó a cerrar los movimientos en el aeropuerto chileno Arturo Merino Benítez. Entre los vuelos cancelados se encontraba el 1289, de Aerolíneas Argentinas, que debía partir el sábado desde Santiago hacia Buenos Aires. Al 1289 se sumaron los que debían partir a primera hora de ayer. Alrededor de 150 pasajeros quedaron varados entonces en la capital chilena, entre ellos, argentinos, chilenos, italianos y estadounidenses.
Según la agencia Télam, parte de los pasajeros denunció a la empresa “por la falta de respuesta ante las cancelaciones”. “Estamos varados desde el sábado sin que la empresa nos diera alojamiento en algún hotel o las correspondientes comidas, como es obligación en estos casos”, señaló el pasajero argentino José Vales. Verónica Uman, también argentina, dijo que “la estamos pasando bastante mal, nadie nos da una respuesta, la oficina de Aerolíneas en este aeropuerto no se hace cargo de nada, recién se desmayó una pasajera que es cardíaca y nosotros tuvimos que socorrerla”. Y según la chilena Carla Isacachi, “llevamos más de 15 horas de espera en este aeropuerto y ni siquiera nos han dado un café; esto no ocurre ni en las peores empresas aéreas”.
El vocero de la empresa consultado por Página/12 tuvo una versión diferente: “El problema fue que, por cuestiones climáticas, las operaciones de Santiago se suspendieron. Los vuelos que tenían que salir desde Buenos Aires quedaron también cancelados porque no tenían dónde aterrizar. El avión que salió hacia Santiago tuvo que regresar a Buenos Aires. Y hay otro que quedó en Mendoza. En Santiago, los pasajeros chilenos tuvieron que volverse a sus casas hasta nuevo aviso. Pero desmentimos rotundamente que no se haya alojado a los pasajeros no chilenos. Todos fueron ubicados en hoteles, como hace habitualmente la compañía, aunque en este caso la demora no haya sido responsabilidad de Aerolíneas”.