SOCIEDAD
› AHORA SE DIRIGE A LA FLORIDA Y PODRIA MULTIPLICAR SU FUERZA
Jeanne dejó 500 muertos en Haití
Pasó como tormenta tropical, pero puede transformarse en huracán. Los Cascos Azules argentinos, enviados como misión de paz por la ONU, coordinan las tareas de ayuda humanitaria. Se desconoce el número total de víctimas, que supera las 500 muertes.
Jeanne asoló a Haití: al menos 500 muertos, la mayoría niños, miles de heridos, desaparecidos y cuantiosos daños materiales. La ciudad más afectada fue Gonaives, ubicada a 150 kilómetros de Puerto Príncipe, donde las intensas lluvias convirtieron las calles en caudalosos ríos y las viviendas fueron arrasadas por las aguas. Jeanne, que bajó a la categoría de tormenta tropical pero que amenaza convertirse nuevamente en huracán, ahora se dirige a la Florida, Estados Unidos, mientras que en Haití dejó un desastre. Naciones Unidas designó al titular del contingente de Cascos Azules argentinos, que integra la Misión de ONU para la Estabilización de Haití (Minustah), como coordinador de la ayuda humanitaria en Gonaives, donde ayer el lento retiro de las aguas dejaba ver el hallazgo de cientos cadáveres. Hoy a las 18 partirá desde Buenos Aires un Hércules con refuerzos que se sumarán a las fuerzas argentinas en Haití. El primer ministro interino de ese país, Gerard Latortue, visitó la región en un camión de la ONU, pero no pudo acceder a las zonas afectadas debido al mal estado de las rutas.
Mucha gente se subió a los árboles o a los techos de sus casas para no ser llevada por el torrencial paso de las aguas. Otros no pudieron escapar. Por eso ayer, cuando las aguas comenzaron a bajar y las fuerzas humanitarias emprendieron su ayuda se encontraron con alrededor de 500 cadáveres. Las calles que por momentos fueron ríos ahora se convirtieron en un espeso y resbaladizo lodo que dificulta el acceso de los vehículos hacia los lugares más afectados. Fueron dos días de fuertes precipitaciones, producto del paso por el Caribe del huracán Jeanne, que afectó a Haití en forma de tormenta tropical.
En Gonaives está instalado, desde agosto pasado, un contingente de 450 Cascos Azules en una misión de mantenimiento de paz de la ONU tras el derrocamiento del presidente Jean-Bertrand Aristide, en febrero último. La delegación, junto a otras fuerzas, quedó a cargo de la evacuación de los damnificados, el traslado de cadáveres, la atención de heridos, aunque las tareas se veían dificultadas por el alto nivel de las inundaciones y por la escasa infraestructura que quedó en pie después del paso del meteoro. No hay energía eléctrica, tampoco sistema de comunicaciones y la ayuda llega al lugar en helicóptero.
“A los efectos de llevar tranquilidad a las familias de los soldados argentinos destacados en esa isla, todos los miembros de las Fuerzas Armadas argentinas están en perfectas condiciones de salud”, informó un comunicado del Estado Mayor Conjunto de las FF.AA. Los Cascos Azules, agrega, están “abocados a colaborar con la ayuda a los pobladores, como así también a reacondicionar las instalaciones del batallón argentino, dado que el mismo también fue afectado por las fuertes tormentas”.
La Fuerza Aérea argentina anunció que hoy, a las 18, despegará de la Brigada Aérea de Moreno, en el oeste del Gran Buenos Aires, un Hércules C-130, con personal que se sumará al contingente de Cascos Azules. En esa nave “viajarán algunos de los pilotos y mecánicos de los helicópteros pertenecientes a la VII Brigada Aérea, que participarán de la misión de paz en ese país”, señaló el comunicado.
“Sobrevolé la sabana desolada, una decena de kilómetros antes de Gonaives. Es un vasto mar”, dijo el primer ministro de Haití, Gerard Latortue, cuyo gobierno declaró “zona de catástrofe” al norte del país.
La mayor cantidad de muertos se registró en Gonaives y en los municipios de Chanfolme y Port de Paix, que sufrieron graves daños debido fundamentalmente a las inundaciones, indicó el ministro del Interior Herard Abraham. Miles de personas fueron evacuadas de sus viviendas en el norte y el noroeste de la isla La Española, que comparten República Dominicana y Haití.
La Minustah reanudó sus vuelos de helicóptero sobre Gonaives para distribuir alimentos y medicamentos, así como equipos de la ONG Médicos Sin Fronteras. Se trata de una ciudad de 200 mil habitantes, una zona de escasos recursos, la más afectada por el tornado. Jeanne, en su paso por República Dominicana, ocasionó 9 muertos; en Puerto Rico, territorio asociado de Estados Unidos, causó 3 muertos y dejó sin servicio eléctrico a medio millón de personas y sin agua potable a 200.000. La tormenta es la última en una serie de huracanes que han causado cuantiosas pérdidas en el Caribe y los estados sureños de Estados Unidos.
Ayer por la tarde, Jeanne estaba a unos 560 kilómetros al este de la isla Gran Abaco, en el archipiélago de Bahamas, con vientos sostenidos de casi 100 kilómetros por hora, mientras se desplazaba con dirección norte-nordeste y, según los meteorólogos, podría fortalecerse y convertirse nuevamente en un huracán.