El ministro de Salud, Ginés González García, consideró que la despenalización del aborto evitaría la muerte anual de “medio millón de mujeres por consecuencias del aborto mal realizado”. “Una actividad que se legaliza deja la clandestinidad, donde muchas veces las malas condiciones son causa de mortalidad materna”, evidenció. Pero esta discusión “es tan fuerte que no puede tomarla sólo la salud pública”, sino que “deberá debatirlo la Legislatura”. El funcionario evaluó que, a fin de cuentas, “estuvimos al borde de que no se pudieran distribuir anticonceptivos”. Es que “la Argentina reacciona todavía con un conservadurismo tremendo. Me critican por impulsar la educación sexual en las escuelas y por repartir preservativos”. Es por eso que “no estamos preparados” para encarar el tema con seriedad. Es más: “En el mundo hay una cierta vuelta atrás”, afirmó el ministro, y mencionó el apoyo que en Estados Unidos tiene Bush por su posición contra el aborto.