SOCIEDAD
Cristian habría estado en manos de un jefe narco
Un detenido dijo que el joven secuestrado en Corrientes estuvo hace cuatro meses en Misiones, custodiado por policías.
Un narcotraficante de nacionalidad paraguaya capturado el jueves en Asunción aseguró que el estudiante Cristian Schaerer, secuestrado en septiembre de 2003 en Corrientes, habría sido entregado a un hombre que se dedica a traficar drogas entre Paraguay y la Argentina. Sus declaraciones estarían en consonancia con los dichos de otros detenidos, entre ellos, un escribano apresado la semana pasada en el marco de la investigación, quien contó que Cristian habría estado, hace cuatro meses, en una mansión de la localidad misionera de Candelaria, “custodiado por policías”. Este último habría sido quien les facilitó documentación falsa a miembros de la banda que secuestró al joven correntino.
Ante la policía paraguaya, Walter Domingo Torres Franco, de 26 años, acusado de tráfico de drogas, sostuvo que el muchacho fue entregado a Agustín Acosta Prieto, hace cuatro meses. Esto coincide con el relato de un testigo apodado Cepillo, quien había asegurado que vio a Cristian en un aserradero de la localidad misionera de Galupá. Y había apuntado que quien lo llevó allí fue un tal Aguy, el nombre con el que se conoce a Acosta Prieto. Este llegó a estar detenido pero, al no haber pruebas que lo involucren con el secuestro, fue liberado.
Al escribano Juan Carlos Insfrán lo detuvieron el jueves de la semana pasada. Se sospecha que fue él quien le consiguió documentación falsa a parte de la banda que secuestró a Cristian. El hombre declaró ahora que el estudiante correntino estuvo hace cuatro meses en Candelaria, una localidad misionera. Según su testimonio, a Cristian lo tenían cautivo dentro de una mansión, custodiado por policías.
Pero el fiscal Oscar Resoagli, a cargo de la investigación del caso, optó por la cautela, al señalar que “hay que tomar con pinzas” el relato de Insfrán, quien además confeccionó una especie de mapa para acceder al lugar donde habrían mantenido cautivo a Cristian. El detenido afirmó que supo estos datos de parte de un conocido, cuya identidad se mantuvo en reserva. Insfrán aseguró que la información “es segura”.
Por su parte, el fiscal correntino Oscar Resoagli sostuvo que “tenemos que tomar con pinzas lo que nos ha dicho Insfrán, porque todo lo que tenemos de él en estos momentos parece ser falso y probablemente esté procurando desviar la atención”, advirtió.
Torres Franco tenía pedido de captura internacional por tráfico de drogas. Fue apresado en la localidad de Santa Rita, en Paraguay, donde se llevó a cabo el pago del rescate del joven. Acosta Prieto, que estaría en alguna parte del Gran Buenos Aires, tiene varios antecedentes, entre ellos, cuatro homicidios en Paraguay, un intento de homicidio, el robo de un camión blindado y asociación ilícita.
Las sospechas sobre Acosta Prieto ya habían sido esgrimidas por el padre de Cristian, Juan Pedro Schaerer, quien manifestó que “si hay alguien que pudo haberle hecho algo a Cristian, es precisamente Acosta Prieto”.
Además de Torres Franco, también se detuvo a su hermano Arístides y a Manuel Vera, quien tenía pedido de captura por estafa. En su poder encontraron el teléfono celular de Benjamín Maciel Passoti, actual senador por el Partido Colorado. Los detenidos fueron trasladados a la Penitenciaría de Ciudad del Este. Una vez cumplidos los trámites de extradición, comparecerán ante la Justicia correntina. Uno de los investigadores afirmó que “como en un enorme rompecabezas, ahora las piezas van poco a poco encajando y tomando forma definitiva”.