SOCIEDAD
› RECOMIENDAN HACER TEST PARA DETECTAR MAL DE CHAGAS
¿Vocé bebeu caldo de cana?
El Ministerio de Salud dice que deben hacerse análisis quienes estuvieron en Santa Catarina en febrero y bebieron jugo de caña. Una experta alienta a que lo hagan los que estuvieron allí los últimos meses.
Por P. L.
El Ministerio de Salud de la Nación recomendó a quienes hayan tomado “caldo” de caña de azúcar, durante febrero o marzo pasados, en el estado brasileño de Santa Catarina –donde se hallan Florianópolis y Camboriú–, hacerse el análisis para confirmar que no hayan contraído el Mal de Chagas. En rigor, no está confirmado que los casos de la enfermedad registrados en esa región brasileña se hayan producido por ingestión del parásito, vía de transmisión “discutida entre los científicos”, según señaló a este diario la coordinadora del Programa de Chagas de la ciudad de Buenos Aires. Sin embargo, esta misma especialista alentó que se hagan el análisis, incluso, personas que hayan estado en Santa Catarina antes de la fecha indicada, ya que “el análisis (una muestra de sangre) es simple y gratuito” en la Red de Chagas que integran hospitales de la ciudad. Esto se inscribe en la política sanitaria de promover la detección de una enfermedad subdiagnosticada: “Quienes sin duda deben hacerse el análisis son las personas procedentes de las provincias argentinas donde el Chagas es endémico”, que son La Rioja, Catamarca, Santiago del Estero, Chaco y el sur de Córdoba. En la ciudad de Buenos Aires, una de cada 30 embarazadas padece Chagas sin saberlo, y el diagnóstico es necesario para que el recién nacido no sufra la enfermedad.
Hasta ayer, en Brasil, el brote había causado cinco muertes; 170 personas estaban en tratamiento y otras 16 esperaban los resultados de los estudios. El comunicado oficial de la Secretaría de Salud de Santa Catarina precisa que “todos los casos de enfermedad de Chagas aguda tienen en común una misma fuente: los quioscos ubicados en las márgenes de la Ruta 101 (en ese estado); y un mismo período de infección: del 13 al 20 de febrero”, sin hacer referencia explícita a la ingestión del “caldo de caña”, refresco elaborado a base de caña de azúcar. De todos modos, la venta de la bebida fue prohibida en todo el estado de Santa Catarina. La hipótesis es que el “caldo” fue elaborado en deficientes condiciones de higiene, con cañas en las que había vinchucas o deposiciones de estos insectos, a su vez vectores del tripanosoma cruci, que causa la enfermedad.
Luisa Giménez, coordinadora del Programa de Chagas del gobierno de la ciudad de Buenos Aires, advirtió que “la transmisión de la enfermedad de Chagas por vía oral fue y es muy discutida y sólo fue constatada fehacientemente en pruebas de laboratorio con ratones; en seres humanos, se suponía que los jugos digestivos impedían la vida del tripanosoma”. Por eso, la especialista sugirió “tomar con cautela, mientras no haya más datos confiables, las informaciones procedentes de Brasil”.
Sin embargo, la doctora Giménez aconsejó “a las personas que estuvieron en Brasil y tomaron esa bebida, concurrir a cualquiera de los hospitales que integran la Red de Chagas de la ciudad de Buenos Aires a hacerse el análisis, que es simple y gratuito”. Los hospitales son el Ramos Mejía –donde funciona un centro de referencia–, Muñiz, Fernández, Santojanni, Penna, Alvarez, Durand, Rivadavia, Piñero; para niños, el Gutiérrez y para embarazadas, la Maternidad Sardá.
Hugo Fernández, director de Epidemiología del Ministerio de Salud de la Nación, sugirió que quienes hayan bebido jugo de caña en Santa Catarina entre febrero y marzo “consulten al centro médico de su zona”. La Secretaría de Salud porteña subrayó que es “conveniente” la consulta para la persona que cumpla dos condiciones: haber tomado “caldo” de caña de azúcar en Santa Catarina durante los últimos 20 días, y además sentir fiebre, decaimiento y dolores musculares; esto atiende al período agudo de la enfermedad, que presenta riesgo inmediato. El Hospital Muñiz se halla “en estado de alerta” al respecto.
Pero los que siempre deben consultar, “sin duda”, son “las personas que provengan de las provincias endémicas, principalmente San Juan, Catamarca, La Rioja, Santiago del Estero, Chaco, Tucumán, Mendoza, o de países comoBolivia y Paraguay”, insistió la doctora Giménez. La enfermedad no se transmite de persona a persona salvo en el caso de la embarazada. En la ciudad de Buenos Aires, una de cada tres embarazadas padece, generalmente sin saberlo, la enfermedad de Chagas; la contrajeron en otras provincias, ya que aquí no hay vinchucas infectadas; en provincias endémicas, la proporción de embarazadas con Chagas llega a una de cada diez. La enfermedad se transmite al recién nacido, que sólo se cura si es tratado de inmediato.