La NASA determinó ayer que los astronautas del transbordador Discovery no realizarán un nuevo paseo espacial (no previsto) para retirar un trozo de manta aislante, de 50 centímetros de longitud, que sobresale del fuselaje de la nave, bajo la ventanilla izquierda.
Tras los análisis realizados, los expertos concluyeron que el aislante despegado no supone riesgo para el transbordador en la reentrada en la atmósfera, aunque puede arrancarse. Este desperfecto era el único que quedaba por analizar para dar luz verde al regreso de la nave el próximo lunes. El pasado miércoles, durante un paseo espacial, Steve Robinson retiró dos juntas, de dos centímetros de longitud, que sobresalían entre unas losetas térmicas de la nave (en la foto las muestra a sus compañeros). La NASA temía que, aunque esas juntas no afectaran la protección térmica del transbordador, podrían crear turbulencias de aire que recalentaran algunas zonas.