SOCIEDAD
› CAMILO GUEVARA EN LA CASA FAMILIAR DE LA HABANA
“El Che no necesita abogados”
› Por Carlos Rodríguez
Desde La Habana, Cuba
Camilo Guevara, el hijo mayor de Ernesto “Che” Guevara, es el coordinador de Proyectos Especiales del centro de estudios que lleva el nombre de su padre y que por ahora funciona en la residencia familiar en el barrio Nuevo Vedado, de La Habana. Lleva una boina que acentúa el parecido con su legendario padre, al que apenas conoció porque lo mataron –hoy hace 38 años– cuando él era muy pequeño. Casi el único tema de esta conversación son los términos “fracasado” o “criminal” con que Alvaro Vargas Llosa, hijo del escritor peruano, y otros, calificaron la vida del Che.
“¿Si el Che fue un fracasado, por qué tantos pueblos y causas lo reclaman?” se pregunta con evidente indignación.”¿Por qué el pueblo que lo vio actuar y lo conoció bien lo aprecia tanto?”, insiste mientras recorre la sencilla casa donde vivió el Che cuando fue ministro de Industria de la revolución y lanzó las multitudinarias jornadas de trabajo voluntario para el corte de caña de azúcar. “La historia la escriben muchas voces –insiste Camilo, de 42 años–, algunas, por supuesto, alimentarán estas campañas de desprestigio y quizá puedan tener algún efecto, incluso hasta en generaciones enteras. Pero a la larga o a la corta los pueblos siempre saben reconocer a sus iguales. Si se respeta la historia sin estas tergiversaciones interesadas, el Che no necesita abogados.”
Camilo habla también en nombre de su familia y sus respuestas son a una serie de notas que fueron escritas por el peruano Alvaro Vargas Llosa, la escritora cubana residente en España Zoe Valdez, pero también se sienten afectados por expresiones de los argentinos Marcelo Gioffré y Pacho O’Donnell. Los dos primeros opinaron que el Che Guevara había “fracasado” y que era “una violenta, selectiva y fría máquina de matar”.
Hoy se realizará un acto homenaje en el Mausoleo de la ciudad de Santa Clara, a unos 280 kilómetros de la capital cubana, donde se guardan los restos mortales del “guerrillero heroico”, como le llaman los cubanos.