Un chico de 17 años fue detenido a las 6 de la mañana de ayer, luego de tres allanamientos en la villa El Monte, de Quilmes. Los investigadores sospechan que el joven participó directamente en el crimen del ejecutivo español de Telefónica, Angel Jiménez Hernández. “Es de los chicos que se ofrecen por billetes en la avenida Santa Fe”, confió a Página/12 un investigador. Después del mediodía, tras un nuevo allanamiento en la villa, fue detenido otro joven, un travesti conocido del primero. Los investigadores creen que el travesti no estuvo directamente ligado al crimen, sino que compró al otro chico un celular que, creen, se trata del teléfono del empresario.

A las 6 de la mañana de ayer, después de dos allanamientos frustrados, un equipo de uniformados de la comisaría 1ª de Quilmes, a cargo del capitán Javier Fredes, y de Homicidios de la Federal, a cargo del comisario Rodolfo Gutiérrez, detuvo a un joven de 17 años en una casilla ubicada a pocos metros de Cevallos y Las Heras, en la villa quilmeña El Monte Matadero, a un costado de la autopista Buenos Aires-La Plata y detrás de un campo de deportes perteneciente al club Quilmes.

Según Fredes, en el allanamiento fueron secuestradas pruebas incriminatorias que acusan al joven en el asesinato del español Jiménez Hernández. Aunque se mantuvo cierta reserva al respecto, la madre del chico aseguró más tarde a los medios que los policías no se habían llevado de su casa lo que, según ella, decían que se habían llevado. “Es mi hijo, sí, es mi hijo –aseguró la mujer, que dijo llamarse Rosa–. Pero no es cierto que de mi casa se hayan llevado ropa ensangrentada. Tampoco es cierto que se llevaron un celular de ese señor. El celular que se llevaron es mío”, decía y repetía la mujer, preocupada en despejar la sombra del crimen sobre sí misma.

Un investigador describió al chico detenido: “Tiene el perfil –confió a este diario– de uno de esos muchachos que se pone un pulóver al cuello y se para en Santa Fe para ofrecerse al que pague. Este chico y el ejecutivo de Telefónica ya habían tenido otros encuentros anteriores”.

Por la tarde, la policía cayó una vez más por la zona, esta vez en Bernal, también partido de Quilmes, en busca de un presunto cómplice del chico. Y lo encontraron. Trascendió que se trataba de un hombre de 27 años. “Es un travesti amigo del chico detenido a la mañana –reveló la misma fuente–. Aunque todavía las pruebas incriminatorias están en la etapa de revisión, encontramos en su poder un celular que pertenecía a la víctima, un Motorola V3 gris plateado, y otro aparato más. Puede ser tanto que el crimen lo hayan cometido entre los dos como puede ser que el segundo le haya comprado a su amigo el celular creyendo que era robado pero no imaginando que tenía encima un homicidio y a toda la policía atrás.”

De acuerdo con los investigadores, al chico de 17 le secuestraron “una agenda con números telefónicos, dos tijeras y un cuchillo tramontina, dos teléfonos celulares de la empresa CTI y una tarjeta portachip de Movistar”.

El crimen fue cometido entre las seis de la tarde y las doce de la noche del 9 de mayo, en el departamento “A” del piso 13, del edificio de Avenida del Libertador 356, en Retiro. Según lo que pudieron determinar los peritos, la puerta del departamento no había sido violentada, por lo que suponen que Jiménez Hernández le o les abrió la puerta. También es posible que el español haya entrado al edificio con uno o los dos detenidos a bordo de su auto por el garaje del edificio, ya que si hubieran ingresado solos tendrían que haber dejado sus datos en el libro de los guardias de seguridad, en la entrada. La víctima llegó al país en 2002 para ocupar la Dirección General de Finanzas Corporativas de Telefónica de Argentina y vivía solo en el departamento donde fue encontrado muerto.