Los padres y la hermana de Martín Ríos, procesado por homicidio agravado “por placer” por el crimen de Alfredo Marcenac, baleado junto a otros jóvenes en el barrio de Belgrano, fueron sometidos ayer a pericias psicológicas para observar si existen patologías del detenido que pudieran evidenciarse a nivel familiar.

Los estudios, ordenados por la jueza María de Pombo, fueron realizados por el mismo equipo multidisciplinario que analizó a Ríos, compuesto por dos médicos forenses, dos de la defensa y uno de la querella, que representa a la familia de Marcenac. Mientras tanto, Martín Ríos también comenzó a ser sometido ayer a “observaciones psiquiátricas y psicológicas” en la cárcel del Hospital Borda.

Las pericias que se le realizan a la familia constan de un análisis psicosocial y otro socioambiental, sobre el que fueron evaluados los padres del detenido, Jorge Ríos y Mónica Díaz, y la hermana, María Paula. Los estudios duraron cuatro horas y se hicieron en forma separada, sin presencia de abogados ni personal judicial. Sí participaron los dos peritos oficiales, los de la defensa –Mariano Castex y Patricia Martínez Lana– y el de la querella, Luis Kvitko.

El resultado de las pericias a los familiares “se va a entregar en forma contemporánea a la elevación del informe que entreguen los profesionales del Borda, que estarán dentro de 15 días”, estimó una fuente judicial. “Los peritos buscan determinar la raíz de la conducta agresiva del imputado ante la sociedad y uno de los caminos que utilizaron es el estudio del grupo familiar”, se explicó.

También señalaron que “fue de gran aporte la información obtenida sobre distintas vivencias de su infancia, adolescencia y comienzos de la adultez. Hay cuestiones que sólo surgen en grupo, como por ejemplo si hay algún rasgo de perversidad en algunos de sus integrantes”.