Los olores fuertes comenzaron a sentirse desde las 6.30 de ayer, en Avenida del Libertador y Rodríguez Peña. Algunos vecinos del barrio porteño de Recoleta advirtieron que el olor salía de un sumidero ubicado en la propia avenida, sobre un caño pluvial; llamaron al 103, número de emergencias porteño y media hora más tarde llegaron varias dotaciones de bomberos, ambulancias del SAME y personal de Defensa Civil, quienes montaron un operativo y cortaron el tránsito en dos carriles de Libertador. Tres personas fueron llevadas al hospital Durand con un cuadro de irritación en las vías respiratorias y en los ojos, pero minutos después fueron dadas de alta. Hasta ayer, autoridades de la ciudad trataban de determinar, mediante muestras de agua que tomaron del caño que pasa debajo de la avenida, de qué tipo de sustancia se trata.

“Lo que se sentía era la emanación de un olor muy fuerte parecido a un solvente, a la salida de un caño pluvial, en una boca importante que está sobre Avenida del Libertador”, explicó a Página/12 Carlos Zoloaga, titular de Defensa Civil. Los peritos retiraron muestras líquidas y gaseosas del interior del sumidero, mientras bomberos arrojaron gran cantidad de agua a su interior para diluir la sustancia que generaba los fuertes olores. Zoloaga detalló además que “se hicieron mediciones y no se encontraron registros que marquen con certeza o que indiquen de qué tipo de producto se trata”. “Se tomaron varias muestras para analizar; los riesgos de explosividad dan negativos. Esto va a ser un trabajo largo, hasta que podamos detectar de dónde salió y de qué se trata.”

Los estudios fueron realizados por la Dirección General de Calidad Ambiental de la ciudad. A raíz del fuerte olor, tres personas, dos de ellas empleadas de un comercio de la zona, debieron ser atendidas en el hospital Durand porque presentaban irritación en las vías aéreas y en los ojos, aunque los asistidos ya fueron dados de alta. Al lugar concurrió también personal de Prefectura Naval Argentina, ya que las tareas de rastrillaje de la sustancia se extendieron hasta la zona del puerto de Buenos Aires.