Se trata de un espacio para que accedan en forma gratuita, durante las 24 horas, los chicos que forman parte de los programas asistenciales del gobierno porteño. Construirán otros cuatro.
Lucas tiene 20 años pero se podría decir que vivió más que la mayor parte de los chicos de su edad. “Cuatro años viví en la calle”, dice. Después de que a los 16 conoció a su mamá, se dio cuenta de que no se llevaban y entonces, sin opción, se quedó viviendo en la calle. Recolección de latas, cartones, cualquier cosa, todo venía bien para subsistir. Mientras tanto estudiaba, terminaba la primaria. Hoy vive en un hogar y planea su futuro como musicoterapeuta y charla con Página/12 mientras interrumpe su juego en la computadora antes de que se inaugure un nuevo espacio para los chicos y chicas en situación de calle: un lugar con juegos en red, con acceso gratuito para niños y adolescentes que formen parte de los programas asistenciales del gobierno porteño. Sus promotores los llaman “cíber-encuentros” y, dicen, apuntan a que también ellos tengan acceso a las nuevas tecnologías todos los días, las 24 horas.
En medio de muchas brechas “hay una brecha digital. Es importante, además de cubrir las necesidades de los chicos preguntarles qué es lo que les interesa”, dice la directora general de Niñez y Adolescencia porteña, Marisa Graham, en torno de las cuestiones que motivaron esta iniciativa que se lanza hoy a las 11 de la mañana.
Este local para cíber-encuentros, dentro de un centro de atención integral, cuenta con más de 15 computadoras, y se ubica en Cochabamba 3565, en el barrio de Boedo. Está pensado para chicos de entre 12 y 18 años, que pertenecen o están vinculados a algún programa del Ministerio de Derechos Humanos de la ciudad de Buenos Aires. Para el año que viene, aseguran, se inaugurarán otros cuatro.
Un estudio realizado por la Universidad Nacional Tres de Febrero indicó que los chicos de la calle gastan el 60 por ciento de lo que recaudan en el cíber. Lucas no conoce esos porcentajes pero sí recuerda que algunas noches “nos prendíamos en los cíber en torneos de Counter strike y nos quedábamos desde las 12 de la noche hasta las 4 de la madrugada”.
Este local no está abierto a todo el mundo. “Cada chico llegará con su operador para que éste pueda continuar el trabajo que comenzó en la calle”, indicó el director adjunto de Niñez y Adolescencia de la ciudad, Adrián Rozengardt. El operador, que forma parte de la Red de Servicios de Atención Integral a las Niñas, Niños y Adolescentes, “trabaja el contacto, el vínculo. A partir de ahí se define una estrategia de intervención para él, hacia su familia o hacia su futuro. Al igual que los paradores, el cíber es una de las estrategias”. Para Rozengardt, “la idea es competir con la nocturnidad en la calle”.
En la ciudad hay “600 chicos de la calle censados por el gobierno porteño. Con 340 de ellos se tiene contacto permanente”, subrayó Graham. Muchos de esos chicos podrán acceder a este lugar.
En este espacio “habrá talleres de informática, un rincón de lectura, un espacio de juego”. También este lugar cuenta con ocho camas por si los chicos se quieren quedar a dormir. Este es el primer local de un total de cinco que se irán abriendo en los próximos meses. En las sedes donde funcionen los espacios tecnológicos habrá otros servicios destinados a la atención de las adicciones, revinculación familiar, deportes y juegos, formación laboral y apoyo escolar.
Eduinho tiene 16. “Me fui de casa porque no estaba conforme con el trato que me daba mi padrastro. Vivía en Florencio Varela. Un día me escapé. Me subí al primer colectivo y dije: donde frene me bajo.” Estuvo dos años en la calle. Hacía malabarismos y dormía en el subte hasta que una chica, a quien él llama “madrina”, le preguntó si no quería dormir en otro lado y lo llevó a un hogar. Hoy él y Lucas viven en la asociación Amanecer, y a partir de hoy podrán usar este cíber cuando quieran. “Me propusieron venir a conocer este lugar y me parece una idea muy buena”, cuenta mientras juega.
Durante la previa a la inauguración, el jefe de Gobierno, Jorge Telerman, señaló que “no hay un problema de chicos de la calle, en general, sino que hay que abordar de forma especial y particular cada caso”. En ese marco, “sabemos que parte de esos chicos recorren los cíber y queremos que esos lugares formen parte del Estado y que sean amigables”.
(Versión para móviles / versión de escritorio)
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina
Versión para móviles / versión de escritorio | RSS
Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux