Esta mañana, a las 8, el Hospital de Clínicas volverá a abrir sus puertas a todo el público, tras nueve días de actividad reducida. Los trabajadores de ese establecimiento acordaron ayer en asamblea levantar el paro que realizaban para reclamar mayor presupuesto, y de esa forma aceptaron la propuesta del Gobierno, que ya había depositado tres de los siete millones que ofreció como salida de corto plazo para la crisis.

En la reunión entre todos los gremios, que tuvo a la cautela como protagonista principal a la hora de analizar la postura gubernamental, el voto mayoritario determinó que se deje de lado la medida de fuerza. Para eso fue fundamental la confirmación oficial de que habían entrado en las arcas los tres millones prometidos a título “inmediato” por el Ministerio de Educación, ya que en la anterior asamblea las dudas al respecto habían llevado a la confirmación del cese de actividades.

“El director del hospital (Angel Alonso) garantizó que con la plata que llegó y llegará se puede recomenzar las actividades. Entonces de manera mayoritaria se decidió suspender la medida”, describió Hernán Chavín, referente de la Asociación de Residentes.

Otro de los puntos que resultaron fundamentales en la resolución fue la ayer ratificada conformación de una comisión “de representación amplia” para discutir y definir el presupuesto del Clínicas para el año próximo y las previsiones a largo plazo en ese sentido.

Estará integrada por el secretario de Políticas Universitarias del Ministerio de Educación, Alberto Dibbern; el decano de la Facultad de Medicina, Alfredo Buzzi; el director del hospital, un representante del rectorado de la UBA y dos por cada una de las organizaciones que nuclean a los trabajadores del establecimiento: la Asociación de Médicos Profesionales, la de Residentes, la del personal de la Universidad de Buenos Aires (Apuba) y ATE.

La comisión, que comenzará a trabajar el próximo lunes y deberá lograr conclusiones antes del 15 de febrero próximo, generó gran expectativa entre los participantes. “Nunca tuvimos la posibilidad de participar en la definición del presupuesto. Soy optimista sobre la evolución que tendrá el hospital a partir de esto. Hasta ahora, el Gobierno demostró con el depósito de los 3 millones que está dispuesto a cumplir lo que prometió”, se entusiasmó Carlos Hernández, titular de la Asociación de Profesionales.

Pero no todos se mostraron tan ilusionados. El delegado de la comisión directiva de Apuba, Miguel Skandar, advirtió que “si en el transcurso de la negociación, se traba o no se cumple (con lo acordado), se vuelve a la medida de fuerza”.

Chavín se expresó en el mismo sentido: “No es que haya desconfianza, lo que pasa es que se llegó a una situación límite y no lo queremos repetir”. El lunes pasado los trabajadores habían rechazado la misma propuesta del Gobierno que ayer aceptaron. Pero en aquella ocasión había tallado la falta de certeza sobre lo concreto. “A ver si todavía levantamos y después no llegan los fondos”, había sido la lógica dominante.

Ante esto, el Ministerio de Educación depositó –a las pocas horas de terminada la asamblea de los trabajadores– tres millones de pesos para la reposición de los insumos fundamentales, que formaban parte del plan de siete millones totales que dirigirá al Clínicas hasta febrero.

Durante los nueve días que duró el paro, se suspendieron las intervenciones quirúrgicas y toda las actividades de consultorios externos, mientras que sólo se atendió a los pacientes internados.