Los asaltantes de barrios privados cumplieron un nuevo record. En 72 horas robaron tres countries de la provincia de Buenos Aires. La seguidilla se inició el martes en el Olivos Golf Club, ubicado en la localidad de Pablo Nogués, en el noroeste del Gran Buenos Aires. Allí maniataron a una familia y robaron unos 10 mil dólares. El segundo objetivo se cumplió al día siguiente, cuando ladrones robaron dinero y documentación de un casa del country Loma Verde, de Escobar. La serie de robos coronó el jueves último en el country Las Praderas, de Pilar, donde lograron robar dinero a una familia, pero no pudieron con una segunda víctima, que se resistió a balazos. Desde comienzos de 2007 ya se registraron doce casos. Pero el gobernador bonaerense, Felipe Solá, trató de poner las cosas en su lugar: “La indefensión máxima es en los barrios pobres”, dijo.

“Yo entiendo que preocupen los robos, pero son casos contados”, sostuvo el gobernador, al ser consultado por la ola de ataques a barrios privados durante una visita al partido de Pilar, donde en lo que va del año se robaron cinco countries. “En los barrios pobres vive gente humilde que también busca más seguridad, sólo que no puede pagarla ni encerrarse”, replicó Solá.

La primera víctima de la semana fue la familia del contador Matías Brea, miembro de la comisión directiva del country Olivos Golf Club, de la localidad de Pablo Nogués, en el partido de Malvinas Argentinas. Brea, al igual que su mujer, sus dos hijos, dos amigos y la empleada doméstica fueron atados de pies y manos con precintos plásticos por tres delincuentes que ingresaron a su casa.

El hecho ocurrió el martes pasado a la noche, aunque recién trascendió ayer. Los ladrones ingresaron por una alcantarilla ubicada sobre una calle aledaña al barrio privado, situado en el kilómetro 321 del ramal Pilar de la ruta Panamericana. Salieron por el mismo conducto llevando consigo un botín de 10 mil dólares, tres mil pesos y una computadora.

Los quejas y reclamos de los propietarios se dirigieron a Codecop, la empresa encargada de la vigilancia del country desde hace cinco años. “No se trató de un robo común, sino de una maniobra de otra empresa, que quiere monopolizar la seguridad en los countries.” La frase había sido adjudicada al gerente comercial de la firma, Carlos Zeballos. En diálogo con Página/12, el gerente negó haber realizado esa denuncia. “No sé de dónde salió esa declaración. No tengo elementos para hacer tal acusación. En nuestro rubro se vive un clima de camaradería. No hay competencia ni distancia entre empresas”, sostuvo Zeballos.

Luego agregó: “Lamentamos que esta familia haya pasado por eso por no poner una reja a tiempo en la alcantarilla. Hace un año que venimos exigiendo a los propietarios enrejar el lugar al igual que la necesidad de instalar mayor tecnología para mejorar la seguridad de un barrio, que hoy está en una situación crítica y vulnerable”. En que en este momento, sólo nueve personas se encargan de la vigilancia de las 570 hectáreas del barrio. Según estimaciones de Zeballos, se requerirían 23 vigilantes para garantizar la seguridad. El gerente reconoció que el servicio de seguridad del barrio está en un proceso de licitación. De todas formas, la empresa resolvió rescindir el contrato con el barrio, ya que considera que en esas condiciones “no se puede garantizar la seguridad”.

El segundo hecho se produjo el miércoles en el country Loma Verde, de Escobar, donde delincuentes ingresaron a una casa para llevarse dinero y documentación de una caja fuerte. La propietaria estaba fuera de la finca haciendo trámites. En este caso, los delincuentes fueron detenidos.

El último episodio se produjo el jueves, cuando cinco delincuentes asaltaron el country Las Praderas, del partido bonaerense de Pilar. Allí ataron a los cuatro ocupantes de una casa y se llevaron 800 pesos. Quisieron ingresar a otro domicilio, pero los tiros del vecino se lo impidieron.