La construcción de torres en la ciudad de Buenos Aires no sólo genera problemas vinculados con la saturación de los servicios o la afectación del paisaje urbano. En el barrio de Boedo, la excavación realizada por una empresa constructora para levantar los cimientos de un edificio provocó el derrumbe de buena parte de una casa vecina, que comparte la medianera con la futura edificación. No se produjeron víctimas.

El episodio ocurrió a las 5.30 de la madrugada, mientras todos dormían en la casa afectada, ubicada en Castro Barros 1641. Tuvo que intervenir la Guardia de Auxilio y Emergencias de la ciudad, que valló el lugar y apuntaló lo que quedó en pie en la vivienda derrumbada.

De acuerdo con lo informado por las fuentes oficiales, las excavaciones ocasionaron la caída completa de la cocina, una escalera, una habitación, como así también daños estructurales en toda la vivienda.

La Guardia de Auxilio y Emergencias procedió a apuntalar las paredes y pisos que no se derrumbaron y, luego, “intimó en forma urgente” para que “se repare el daño y se establezcan las normas mínimas de seguridad”.

El dueño de la vivienda afectada denunció que ya había advertido a la empresa constructora sobre la posibilidad de un derrumbe, por las rajaduras que presentaba la pared lindera, pero aseguró que “el arquitecto que estaba a cargo de las obras, el día anterior había revisado la casa y dijo que no había peligro”.