La investigación sobre la realización de fiestas sexuales en horas de clase –con participación de docentes y alumnas–, en la Escuela Técnica Nº 1 de Escobar, derivó en la separación de sus cargos de un total de 27 profesores, entre los que figuran las máximas autoridades del establecimiento. La medida fue anunciada ayer por la directora general de Cultura y Educación bonaerense, Adriana Puiggrós, quien reveló que además del escándalo sexual se descubrió la existencia de “una asociación presuntamente ilícita” que funcionaba dentro del colegio y que también se investigan presuntas irregularidades en el manejo de los fondos de la cooperadora. La situación planteada hizo que las autoridades educativas provinciales presentaran ante la Justicia tres causas penales. De lo dicho por Puiggrós se desprende que la primera conclusión es que “existen causas para abrir sumarios, por lo cual hemos separado del cargo a 27 docentes, incluyendo a la inspectora distrital (Viviana Otegui), el director de la escuela (Carlos Alberto Rombolá) y el vicedirector (Jorge Leonardo Zayas)”. En la investigación administrativa, la Auditoría General detectó un faltante “por ahora” de 59 mil pesos, sólo en el año 2006.

La primera de las causas abiertas tiene relación con “presuntos delitos de orden sexual y de abusos de menores cometidos adentro de la escuela” en el año 2005, pero que recién fueron conocidos públicamente el pasado mes de abril, a partir de una denuncia anónima que llegó a la Dirección General de Educación y que en mayo tuvo repercusión en la prensa.

Las evidencias fueron corroboradas con la difusión de varias fotografías, en las que aparecen dos o tres alumnas que ya habrían egresado y al menos tres profesores, participando algunos de ellos en secuencias de sexo explícito o posando ante las cámaras –dos de las alumnas– desnudas o en ropa interior, con portaligas y prendas mínimas.

A nivel institucional, la investigación fue derivada a la Dirección de Coordinación Legal, y el 11 de abril se hizo una presentación ante la Fiscalía Penal Nº 2 de Escobar, a cargo de Irene Molinari.

En la información que ayer proporcionó la Dirección General de Educación, se dejó constancia de que esa primera causa fue dirigida contra los docentes “presuntamente implicados en las fotografías”. También se había mencionado la posibilidad de que haya participado una profesora de inglés cuyo nombre no fue difundido. Hasta ahora, ese dato no fue confirmado oficialmente.

Por el primero de los temas fueron sancionados el director y el vicedirector de la escuela, teniendo en cuenta que “se habría violentado la vigilancia, orden y decoro de la institución, ya sea por acción u omisión de los responsables máximos del colegio”. Después se supo que había un tercer docente involucrado.

En forma paralela se ordenó un sumario contra la inspectora distrital Viviana Otegui “por no ejercer debidamente su rol de supervisión sobre el establecimiento”. Al mismo tiempo, al avanzar la investigación, se tomó conocimiento de irregularidades que habrían ocurrido en el área de Taller.

Lo confirmado es que se detectó “ausencia de registro de firmas, inexistencia del libro de temas, reiteradas denuncias de los padres en cuanto a la ausencia de los profesores, salidas del establecimiento de profesores del área Taller en momentos en que debían dictar clases”. Las salidas se produjeron “sin autorización ni justificativo aparente”. Ese sumario apunta a los jefes del área.

Al mismo tiempo, la Dirección de Auditoría obtuvo datos relacionados con la existencia de una Asociación Civil denominada Instituto Superior Tecnológico Hipólito Bouchard, es decir que lleva el mismo nombre que la Escuela Técnica. Esa asociación fue constituida en julio de 2004 y está integrada por docentes de la escuela, la mayoría del área Taller. El propio director del establecimiento, Carlos Alberto Rombolá, era el presidente de la asociación. La situación, por ser totalmente irregular, fue denunciada penalmente el 15 de junio pasado ante la fiscalía de la doctora Molinari.

La asociación funcionaba dentro de la escuela “sin consentimiento alguno de la superioridad”, es decir de las autoridades educativas bonerenses.

La organización cuestionada estaba integrada por los docentes y “socios fundadores” de la asociación.

En el transcurso de la investigación también se recogieron testimonios y pruebas “con respecto a intimidaciones que algunos docentes ejercían en los actos públicos contra docentes que pretendían acceder a determinados cargos en la escuela técnica”.

La auditoría interna también encontró “serias irregularidades” en el manejo de los fondos de la Asociación Cooperadora de la escuela. Esto dio lugar a la tercera presentación, el 27 de junio, ante la misma fiscalía de Escobar. Todos los docentes involucrados han sido relevados de sus cargos.