Los siete adolescentes que estaban acusados del homicidio de Matías Bragagnolo, ocurrido en Palermo en 2006, fueron desvinculados de ese delito porque la Justicia considera que aún no está probado que el joven haya sido asesinado, aunque tres de ellos fueron procesados por privarlo de la libertad. La medida fue adoptada por la Cámara del Crimen porteña, que señaló que las causas de la muerte del joven todavía no han sido fehacientemente determinadas y que debe ser en el juicio oral donde se tendrá que determinar si los adolescentes tuvieron o no relación con la muerte.

En el fallo, los jueces Jorge Rimondi, Alfredo Barbarosch y Gustavo Bruzzone revocaron el procesamiento por homicidio preterintencional de tres de los acusados, que había dictado la jueza de menores María Teresa Salgueiro, y los procesaron por privación ilegal de la libertad.

Con respecto a los otros cuatro menores de edad involucrados en el caso, procesados por la magistrada por homicidio culposo (sin intención de matar), los camaristas resolvieron “revocar parcialmente” esa imputación y dictarles la falta de mérito.

En la resolución, los jueces afirmaron que aún “no se encuentran fehacientemente establecidas las causas del fallecimiento de Matías Bragagnolo”, debido a “los disímiles informes que obran en el legajo”. “Este tópico debe ser esclarecido en la etapa posterior, ya sea ampliándose el informe practicado por los especialistas de la Facultad de Medicina de la UBA o citándose a aquellos a fin que se explayen en torno de las conclusiones a las que se han arribado”, añadieron.

Los camaristas destacaron que “los principios de inmediatez y oralidad que juegan en el juicio habilitarán a los magistrados a los que les corresponda intervenir, determinar o no las causas que provocaron su deceso y evaluar si éstas poseen relevancia penal”.

Bragagnolo murió la madrugada del domingo 9 de abril de 2006, cuando, tras salir de una fiesta junto a amigos para comprar bebidas, fue sorprendido por un grupo de jóvenes con los que se habría generado una pelea. Previamente, los supuestos atacantes le habían dicho a un policía que Matías les había robado un teléfono celular y tanto los jóvenes como el efectivo lo persiguieron hasta el palier del edificio ubicado en Ortiz de Ocampo 2882, donde se realizó una requisa, Matías se sintió mal y luego falleció. En la investigación se comprobó que lo del celular era una mentira: sobre esa base y teniendo en cuenta que Bragagnolo fue requisado por el policía, la Cámara determinó la imputación de “privación ilegal de la libertad” para tres de los jóvenes acusados.

En la etapa de instrucción de la causa, se elevaron a Salgueiro diferentes conclusiones: que el joven había sufrido asfixia mecánica, que había fallecido a raíz de los golpes propinados por los imputados y que había muerto de manera natural o por afecciones congénitas que derivaron en una “muerte súbita”.