El oficial de la policía de Jujuy Alejandro Raúl Carlos fue condenado a prisión perpetua por homicidio agravado y apremios ilegales. La víctima fue el joven Josué Saúl Mendoza, quien falleció en junio de 2006 cuando estaba detenido en la seccional IV de la policía provincial. La misma Sala III de la Cámara Penal condenó también, a cuatro años, al policía Walberto Yurquina, por ser responsable del delito de apremios ilegales. Los jueces absolvieron a un tercer uniformado, Sergio Rodolfo Márquez, y ordenaron que se remitiera a la fiscalía del Juzgado Penal II una investigación para determinar si un cuarto policía, Fernando Carlos Aramayo, cometió el delito de encubrimiento. El crimen ocurrió el 30 de junio de 2006, al finalizar el partido que la selección de Alemania le ganó a la de la Argentina en el Campeonato Mundial de ese año. Hubo un incidente y la policía quiso detener a Mendoza, que estaba ebrio. Varios testigos declararon que los policías golpearon y estrangularon a la víctima.
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