Preservativos, DIU, anticonceptivos inyectables, pastillas y hasta la “píldora del día después” son algunos de los métodos anticonceptivos y de emergencia que tendrá a disposición la UBA para entregar a sus alumnos. Se trata de un convenio firmado ayer en el Ministerio de Salud y la universidad que establece la distribución gratuita de métodos anticonceptivos entre alrededor de 40 mil jóvenes sin obra social que asisten a estudiar. “A los chicos hay que cuidarlos dentro y fuera de la universidad y por ellos vamos a brindarles la información, la educación y los insumos para cuidarlos”, aseguró el ministro de Salud, Ginés González García, en diálogo con Página/12. El acuerdo contempla además la entrega de los medicamentos incluidos dentro del Programa Nacional Remediar.

De esta manera, la UBA se suma al listado de centros académicos que suscribieron este acuerdo con la cartera sanitaria. En la actualidad, las universidades de Mar del Plata, Córdoba, Tucumán y La Plata ya distribuyen estos beneficios entre los estudiantes. “La semana próxima firmaremos el mismo convenio con Rosario”, adelantó González García y agregó que “el objetivo es llegar con este proyecto de asistencia a todas las universidades del país”.

El convenio, firmado ayer entre el ministro de Salud y el rector de la UBA, Rubén Hallú, contempla en primer lugar la entrega de los insumos que integran el Programa Nacional de Salud Sexual y Procreación Responsable y el de Prevención del Sida. Esto permitirá garantizar a los alumnos anticonceptivos hormonales combinados e inyectables, anticonceptivos hormonales de emergencia, o más conocidos como la “píldora del día después”, y dispositivos intrauterinos. También se distribuirán preservativos en forma gratuita entre los estudiantes.

“De esta manera, vamos a prevenir enfermedades de transmisión sexual y embarazos no deseados entre los jóvenes, que representan la población más vulnerable a este tema”, explicó el funcionario. La distribución de métodos de anticonceptivos será complementada con campañas de concientización y capacitación sobre su uso. También se distribuirán los medicamentos incluidos en el programa Remediar, que incluye antibióticos, analgésicos y remedios para enfermedades hormonales”, precisó Oscar García, secretario de Extensión y Bienestar Social de la UBA.

La ayuda está destinada a unos 40 mil alumnos, de entre 18 y 28 años, de bajos recursos que no tienen obra social ni medicina prepaga, lo que representa entre un 12 y un 15 por ciento de la población estudiantil. De todas formas, esto no significa que el resto de los alumnos no pueda realizar consultas ni acceder a un medicamento determinado. “Aunque tengan obra social podrán acceder a información sobre sida, a toda la gama de métodos anticonceptivos, a medicamentos”, aclararon fuentes ministeriales.

Para implementar el proyecto, la universidad creará el Centro de Atención Primaria de la Salud que funcionará en la órbita de la Dirección de Salud. Hasta el momento, la UBA contaba con personal médico encargado de la atención clínica y ginecológica de las alumnas, pero no tenía los recursos para garantizar los remedios ni métodos de prevención. El paso siguiente es acondicionar el espacio de asistencia y nombrar personal farmacológico. Los alumnos deberán presentar receta del médico para acceder a los medicamentos, comprendidos en el programa Remediar. “Creemos que a principios del año estará todo resuelto para comenzar a atender a los alumnos y poder brindarles los insumos”, informó Oscar García.

El último convenio firmado entre el ministerio y la Universidad de La Plata, en agosto pasado, generó el rechazo de sectores conservadores ya que comprende la entrega de la pastilla del día después. Para la Iglesia Católica, la píldora es abortiva. Ante un posible repudio de este nuevo convenio por parte de los mismos sectores, el ministro de Salud reafirmó su línea política en materia de salud sexual y reproductiva. “Vamos a cuidar a los jóvenes dentro y fuera de la universidad, y por ello potenciaremos el nivel de información, de educación y de recursos para cuidarlos”, sostuvo.