Legisladores porteños, con el apoyo de diputados nacionales, lanzaron una campaña de recolección de firmas contra el revalúo del impuesto de Alumbrado, Barrido y Limpieza, en la ciudad de Buenos Aires, acordado recientemente en una comisión y que, de ser aprobado por la Legislatura, debería aplicarse con la primera cuota de 2008, con el debut de la gestión de Mauricio Macri.

La convocatoria fue lanzada ayer por los diputados Martín Hourest (Buenos Aires para Todos), Liliana Parada y Facundo Di Filippo (ARI), Héctor Bidonde y Sergio Molina (Bloque del Sur) y fue apoyada por los diputados nacionales Claudio Lozano, María América González, Delia Bisutti y Emilio García Méndez.

La Legislatura prevé tratar antes del 10 de diciembre, junto con el presupuesto, el proyecto parcialmente consensuado en la Comisión de Reforma Tributaria, que integraron legisladores de los tres bloques mayoritarios y representantes del Ejecutivo. Ese proyecto divide la ciudad en 80 zonas, en las que se aplican nueve coeficientes distintos de ajuste, que van del 230 por ciento en Puerto Madero y Barrio Parque, al cero por ciento en las zonas vecinas al Riachuelo. Ese dictamen fue apoyado por el macrismo y los diputados telermanistas, mientras que los kirchneristas se opusieron, en minoría.

A esa situación se agrega la campaña de recolección de firmas lanzada ayer bajo el lema “A casa diferente ABL diferente”, que propone un relevamiento casa por casa, de manera de arribar a un revalúo “con mayor equidad”.

“La necesaria reforma del ABL no remite a la búsqueda de mayores recursos ni a hacer más eficaz la recaudación sino a construir la equidad (quien más tiene más paga), argumentaron los legisladores. Según Hourest, “la división de la ciudad en zonas no garantiza la equidad, ya que en una misma manzana pueden coexistir un edificio de oficinas de categoría, una torre de viviendas y una vieja casa tipo chorizo, que tendrá el mismo aumento de impuestos que los primeros”.