A tres semanas de asumir como ministro de Salud de Santa Fe, el actual secretario de la cartera sanitaria de Rosario, Miguel Angel Capiello, manifestó ayer su apoyo a la “despenalización de la interrupción del embarazo” y aseguró que “ningún hospital de Santa Fe denunciará a la mujer que llegue con un aborto en curso”.

“Los medicamentos y la capacidad científica están; necesitamos que la gente lo use para evitar embarazos”, consideró al respecto quien desde el 10 de diciembre estará a cargo de la salud de una provincia donde una de cada cuatro madres es menor de 18 años. Y anunció ya estar trabajando con otros funcionarios en políticas de salud y educación sexual.

Una de sus declaraciones pone de manifiesto la impronta de próxima gestión al frente del Ministerio de Salud provincial: “El aborto debe ser despenalizado y nunca penalizada una mujer en esa situación”.

Una posición diferente de la sostenida por la ministra saliente, Silvia Simoncini, cuestionada por negar a varias mujeres realizarse abortos terapéuticos.